En los tiempos perturbados por los que atraviesa la Humanidad ¿no es ciertamente un verdadero consuelo el saber que Seres Superiores vienen hacia nosotros para guiarnos hacia una mayor comprensión?.
La edición mensual de los “Propósitos Psicológicos” es esperada con impaciencia pues ésta irradia luz sobre temas amplios y profundos1.
Esta alimentación espiritual abrirá horizontes nuevos a algunos de nosotros.
En este siglo tan materialista, a veces es bueno, no es verdad? olvidar las contingencias del momento, las tribulaciones de aquí abajo y detenerse a meditar sobre ciertas ideas fundamentales, andando hacia las Alturas Sublimes.
Qué sueño mas bonito cuando se escapa de la materia para planear por las Bellezas etéreas! Este descanso fortifica el alma y de este modo nos permite volver a tomar la cadena del trabajo diario con más fuerza, estando mejor adaptados durante nuestro paso terrestre para realizar el avance sobre SI mismo.
Los escritos muchas veces actúan como “SALVADORES”. ¡Cuántas Obras no han impedido muertes premeditadas, volviendo a dar una luz de esperanza, un atisbo de confianza!
Hacen súbitamente realizar que la vida física no es una terminación y que más allá, la VIDA, eternamente continúa su vuelta incesante; lo que ocurre es una simple metamorfosis; las formas cambian, pero el Espíritu es inmutable.
Las experiencias se suceden ofreciéndonos mejor comprensión, el conocimiento profundo del SI, y es entonces cuando el individual percibe el universal.
Es la elevación sublime, la perfecta Realización del Ser.
Este estado de conciencia no se adquiere sin tropiezos. Siempre que puede, el animal busca la Reacción ya que es muy duro acallar los instintos. Es a fuerza de tropezones, por una Voluntad incesante de llegar a un estadosuperior, volviendo a poner sin cesar la obra sobre el telar, o mejor todavía, realizar el trabajo de la piedra bruta, desembarazándola de los viles y groseros agregados, puliéndola fielmente para la Construcción del Edificio: El Templo donde se encuentra el Eternal, el Divino Arquitecto.
De este modo, Amigos desconocidos pero lectores fieles, que el grano que siembra el autor de los “Propósitos Psicológicos” levante vuestro espíritu y que la emanación de nuestros Centros purificados ilumine la Humanidad con la llama Sagrada.
Mensaje dirigido por el Dr. S. R. de la Ferrière
Presidente de la Federación Internacional de las Sociedades
Científicas, al Primer Congreso de Instituciones Libres Científicas y
Filosóficas de la América Latina (San Pablo del Brasil)
En el momento en que el mundo en tal forma manifiesta su deseo de SABER es particularmente interesante ver qué hombres toman la iniciativa de las directivas indispensables a la reeducación de la Humanidad.
Es muy espectacular la constatación de que es en América Latina donde se constituyen los núcleos educadores, respondiendo así a las reglas de evolución de los Centros esotérico-espirituales. Efectivamente, la Cima Espiritual del mundo situada en el Tíbet durante esta última época (La Era Pisciana), se desplaza para volver a la América del Sur como en los tiempos de la Antigua civilización post-Atlántica.
La Era del Acuarius (Período del Aguador) en la cual acabamos de entrar, debe manifestarse en el Continente Sudamericano como continuación a la transformación electromagnética debida a la nueva polaridad dinamo-telúrica, consecuencia no solamente de un cambio del eje terrestre sino también de los fenómenos de precesión equinoccial. Esta homogeneidad de la astronomía de la geología confirma el axioma célebre de Hermes Trimegisto: "Lo que está arriba es como lo que existe abajo a fin de que se realice el milagro de la Unidad". No es necesario recordar que este equilibrio entre el macrocosmo y el microcosmo se infiltra en los más pequeños detalles; por ejemplo: las 72 pulsaciones por minuto del ser humano normal, corresponden a las pulsaciones cósmicas cuando el Sol retrogada en su movimiento aparente sobre la eclíptica a razón de un grado cada 72 años. Igualmente, las 25.920 respiraciones del ser humano en 24 horas, son como la representación de los 25.920 años que tarda una estrella llamada "fija" para regresar a su punto de impacto.
Lo que sufre el género humano actual es tanto una falta de conocimiento científico como de bases filosóficas. Bajo un aparente saber de las cosas objetivas, el hombre está limitado en un vago simbolismo de los números y en una especie de tintura de documentación física, pero en realidad ignora las leyes primordiales. Los "números primeros" que nos han sido enseñados en la escuela primaria, son, es cierto, un juego para niños, y, sin embargo, su razón matemática es desconocida de los hombres en general, los cuales encuentran algunas dificultades inclusive al enumerarlos. Es debido a esto, quizá, que el célebre Eratósthenes (inventor del famoso cernedor que lleva su nombre) habiendo previsto lo anterior, largo tiempo atrás, se dejó morir de hambre.
Sin ir tan lejos como el teorema de Fermat, debemos recordar que nunca ha sido probado que dos más dos hacen cuatro. Lo que está escrito en el Libro 7 de Euclides sobre la multiplicación de los números, son meros "enunciados". Lo que Newton ha ofrecido es una "demostración", pero la prueba de este resultado no fue hecha nunca.
Quizá se ha querido especular demasiado con la Geometría olvidando la Guametría; tal vez la Ciencia Numérica fue demasiado considerada como una simbología y no como una genética.
Sería necesario organizar estas recreaciones matemáticas y tener como recurso también el esoterismo religioso, pues como lo he demostrado en mi libro "Misticismo en el Siglo XX" estas cuestiones marchan parejas. Se evitarían teorías aritméticas equivocadas, mediante el conocimiento de la Qabbalah y de la Doctrina Secreta, y la Religión sería mejor comprendida mediante la documentación sobre el mecanismo de los números.
¿Qué se sabe en el ambiente médico? Apenas si es posible en un 14% de los casos hacer un diagnóstico casi válido e ignorando en la mayor parte de los casos: los hechos. Podríamos tomar un caso difícil, como la NOVOCOCAINIZACION del ganglio estrellado en las lesiones de la angina de pecho, o preguntar sencillamente cuál es el origen de la enfermedad de RAYNAUD, la cual, en los espasmófilos, se origina en los desórdenes hepático- digestivos.
Ningún electro-cardiograma podría definir el "por qué" (puesto que se sabe por otra parte, que la gráfica puede presentar variaciones entre dos exámenes). En el caso de insuficiencia cardiaca podría razonar evidentemente con PICK, OSATO, BUDINGEN, KISCHINIOS y GOMEZ, diciendo que el papel que juega el glicógeno en la contracción muscular, permite considerar como lógica la terapéutica de la insuficiencia cardiaca por medio de la glucosa, y en aquellos casos donde la utilización está facilitada por la inyección concomitante de una pequeña dosis de insulina!...
¡Ay! El muguete empleado por MATTIOLE en el siglo XVI era quizá más saludable; de hecho, las propiedades farmacodinámicas del ADONIS VERNALIS o de la CONVAUARIA tienen sin duda una acción ligeramente nociva sobre el hígado; ¿pero cuántos peligros no ofrece también la penicilina? No es quizás el momento de tratar los errores groseros, como por ejemplo, en los estados psicotécnicos. Es bueno sin embargo saber que ganaremos volviendo al estudio de las Antiguas Ciencias Sagradas, considerando un poco más no solamente a la Astrobiología sino que puede decirse que la medicina ha sido sacada de la Astrología, la cual a su vez forma una sola ciencia con la Astronomía y la Magia. Tendremos también interés en considerar el método YOGA pues esta Ciencia que da a conocer los Chakras (centros nervo-fluídicos) vale mucho más que el débil conocimiento de la endocrinología moderna. Es necesario vigilar con cuidado nuestro sistema de alimentación, inspirándonos en algunas razas del Himalaya, conocidas por su longevidad, las cuales hacen uso del GAURI, en lugar de intoxicarnos con las vitaminas presentadas en los productos químicos; se puede también prever el cultivo de plantas de la especie del ATBALA y de otras semillas tibetanas con propiedades curativas y estimulantes de la energía vital.
El TAO DIETETICO da los 5 medios o maneras sublimes para realizar la vida personal ideal, que es un fenómeno único en Sí. Según las sectas YANG del TAO, son los siguientes: 1) Hacer el bien, II) Cuidar el esperma, III) Asimilar el aire, IV) absorber cantidad suficiente de la droga de perennidad, y V) emplear juiciosamente los agregados auxiliares.
Los Monjes de la Hermandad del Puro-Augusto aseguran la vida en 729 años, por la observancia estricta de las acciones citadas en el TAO TE KHING (1.200 condiciones son necesarias; ¡incluso 1.199 no son suficientes!).
El gran pensador KEUE-HOUNG, dice: "no hay supervivencia sino para los Genios, es decir, para aquellos que han trabajado sobre sí mismos con éxito".
La práctica de la auto-sugestión tiene como finalidad la de hacer presentar el Inconsciente: CONSCIENTE y no como los psiquiatras occidentales que hacen a la Conciencia volverse INCONSCIENTE.
Estamos en pleno trabajo de Alquimia Espiritual (naturalmente este trabajo puede tener variaciones según los terrenos. Efectivamente, sabiendo ya que la tierra gira a 465 metros por segundo en el Ecuador, mientras que su rotación a 50° de latitud Norte no es más que de 250 metros por segundo, esto debe influenciar sobre el método a emplear. Este movimiento de la tierra, que difiere según el país donde uno se encuentra, no es el único elemento a tratar, pero el límite de esta exposición impide tratar los otros factores y todas las consideraciones demasiado técnicas).
Es necesario, sin embargo, establecer un método general, como igualmente una moral universal, dejando, sin embargo, las diversas posibilidades, según el tiempo y el lugar.
De ahí la necesidad del Gran Congreso para tratar las disposiciones que se deban tomar, a fin de establecer un reino humano en mejor relación con sus deseos y sus capacidades; en una palabra, la reconstitución de los derechos del hombre, dentro de su carácter real, según la enseñanza de la Tradición Iniciática.
He asistido personalmente a la Convención de las Fuerzas del Espíritu en París en 1947, al Congreso Internacional de la Paz en Nueva York en 1949, en el cual yo fui el Presidente de Honor, y al Congreso Espiritual Mundial de Bruselas. De ninguna de estas reuniones ha quedado cosa alguna, debido a que los participantes han pensado, sobre todo, en hacerse valer mediante discursos pomposos y discutir sobre una fraseología vacía de sentido. Es necesario establecer un Tercer Frente, una Línea Espiritual, una fuerza más elevada que los convencionalismos del materialismo abyecto y fuera de una política social caduca. Viene a ser una necesidad absoluta ver el problema de muy cerca; las nociones científicas deben venir como ayuda para la solución del problema como igualmente debe ser observado el principio espiritual. Sin embargo, por Ciencia, es necesario entender el conjunto de conocimientos y no el dominio de algunos privilegiados, pontífices de un mundo absoluto, limitado dentro del dominio de los intereses creados. Igualmente, por principio Espiritual no hay que sobreentender la renta de algunas sectas religiosas o el dogma de doctrinas fanáticas. En una palabra, salir del dogmatismo tanto religioso como científico y partir por un nuevo camino en esta Era Acuariana, que necesita la colaboración de todos.
En los principios filosóficos de hoy, olvidamos, demasiado a menudo, la parte activa del método y es porque vemos el mundo en la indecisión. Una dinámica cultural espiritual debe reemplazar a la creencia inerte; 300 religiones se dividen el mundo disputándose el Pensamiento Humano, en nombre de la defensa de la Verdad. El cerebro del siglo XX está cansado de dirigir sus efectos hacia diferentes ideologías ¿Por qué seguir profanando por más tiempo la Obra Divina?
Unamos nuestros esfuerzos por esta Causa Grandiosa hacia una Idea Común de Tolerancia y de Paz; la Unión, (Yoga), la Identificación.
Dirijo a todos los participantes mis votos los más sinceros por esta Realización.
PRINCIPIOS SOBRE LA VERDAD
Una vez que las puertas de los Santuarios de Tebas eran cerradas, se debía responder al Gran "X" Algebraico Eterno
"¿Qué es la Verdad?"
La respuesta era: "I.E.V.E.", que es necesario comentar geométricamente de esta manera:
Esta gran "X" (Cruz de San Andrés), es en primer lugar la letra griega "KHI", que encontramos en las bases del trabajo alquímico con las iniciales de las palabras KONES (el oro), KRUSOS (el crisol) y KRONOS (el tiempo). Esta triple desconocida de la Gran Obra Hermética, está representada por un jeroglífico, reducido a su más simple expresión: los radios de las radiaciones luminosas emitidas desde un hogar único. Las cuatro ramas representan, naturalmente, los cuatro principios de la alquimia: AZOHE, MERCURIO, SAL Y AZUFRE, así como los elementos: sutil, espeso, volátil y absoluto; es aún, el Aire, el Agua, la Tierra y el Fuego de la Física de los Antiguos, que en las ideas filosóficas son: el Espíritu, la Materia, el Movimiento y el Reposo.
En resumen, partiendo de las ciencias físicas actuales, es necesario decir que en el Universo: la Sustancia plástica (la tierra) accesible a nuestras percepciones sensoriales, es infinitesimal (casi nula), en relación al espacio viviente que la encierra.
Saint Ives d'Alveydre ha dejado ya entrever, que por encima de las fuerzas actualmente estudiadas en las Universidades, pueden haber otros elementos igualmente reales, aún inaccesibles a los solos sentidos, pero que la Ciencia de una Antigüedad muy lejana podría haber discernido, cultivado y clasificado con exactitud, según su orden correspondiente. Fabre d'Olivet ha demostrado que Moisés había depositado herméticamente los Principios de esta Ciencia completa en el texto de su Cosmogonía, escrita a la manera egipcia.
Volviendo a la respuesta sobre el Gran "X" Eterno ¿acaso no es de este misterio del que Jesús habla en su Profundo Ruego? Cuando El dice, por el Estado Social, por el Hombre Colectivo, como por el individuo:
"Qué Vuestro Nombre sea Santificado".
Este Nombre, que se establece en las diferentes jerarquías para que los diversos planos sean también "Santificados" por su Nombre.
Habría también muchas cosas que decir sobre este Nombre y sobre este "Esquema" hierogramático. Para comenzar analicemos la palabra "Esquema", la cual desgraciadamente pierde una parte de su valor al ser traducida a otro idioma que no sea el Francés, lengua en la cual tiene un sentido real y profundo.
Sabemos que el alfabeto hebraico está constituido, en primer término por tres letras llamadas "Madres": ALEPH, MEM, SHIN. Ahora, como esta lengua se escribe de derecha a izquierda, tenemos pues: "S M A" (SheMA), lo cual representa todo el esquema del alfabeto. Es como el esquema (Schéme) de la lengua vulgar francesa, que significa bosquejo, la figura simplificada que sirve para la demostración y que representa, no la forma, sino las relaciones y el funcionamiento de los objetos. El término "Shema" no es solamente el croquis ("the sketch" como dicen los ingleses) del alfabeto hebraico, sino también la demostración de los vocablos sagrados. Así se encuentran en numerosas palabras divinas o teniendo un carácter sagrado, estas tres letras "madres".
Tomemos un ejemplo con la palabra "SHILMA" (Shin-Lamed-Mem-Aleph): la Jerusalem Celeste, que puede asimilarse esotéricamente con DEUS, HEVA, AZOTH, INRI.
Shema, por estar compuesta con las tres letras Madres, es el Plan del Mundo Eterno. El término "SHEM" indica el renombre, el brillo y, de una manera extendida, sería el Espacio Etéreo (El Empíreo) y, a veces, el mismo Dios, en siríaco y en samaritano. Se dice que SHEM, fue uno de los tres hijos de Noé. Sería necesario no ver únicamente el personaje, ya que NOAH representa también el descanso de la existencia; engendró tres hijos (como ADAM): Shem, Ham y Japhet, a los cuales se les puede aproximar a Kain (Cain), Habel (Abel) y Seth (Set), los 3 hijos de Adam. Sin embargo, mientras que Adán en su caída ha producido las tres potencias sub-nombradas, por otro lado, las producciones de Noé son Shem (representa a Abel) después HAM (que sería Cain) y JAPHETH (equivalente a Set), que serían los principios constituidos del ser invocado. Moisés une conjuntamente esta tríada Única, para no formar sino un solo nombre (versículo 23 del capítulo VII del Sepher). "Fue Noah (a la Thebah) y Shem, Ham y Japheth". Es, pues, la representación jeroglífica de lo que es el ser cosmogónico, llamado Noé, así como todos los cuerpos naturales mediante las tres dimensiones geométricas.
SHEM (es éste el que fue elevado), emanó las siguientes producciones: WEILAM (duración infinita), ASSHOUR (poder legal), ARPA-CHESAD (el principio mediador), LOUD (Propagación) y ARAM (elementación universal).
Este (SheMA), Esquema, es todavía el signo mediante el cual el Verbo marca los elementos sagrados, como por ejemplo, en San Juan el Bautista, que no ha recibido por azar un nombre arqueométrico (hablo de esta cuestión en mi libro "Los Misterios Revelados"). Es el IOHAN del IONAH.
IOHAN, es el nombre de San Juan, Patrón de la Iglesia Celta, como San Pedro de la de Roma. Se puede preguntar también por qué IONA, la Isla Santa, que forma parte de las Hébridas, habría recibido por coincidencia un nombre tan similar. Se ha hecho remarcar la similitud de esta Isla Iona y el nombre de San Juan (Iohan), ya que fue en esta pequeña porción de tierra, de 26 kilómetros cuadrados (cerca de la Isla de Mull), donde se refugiaron los Templarios (Johannitas) y es ahí donde reposan Reyes y Jefes del Clan de Escocia. Es también la cuna de la Masonería (Johannita) llamada Escocesa y fundada el día de la fiesta de San Juan en 1717.
El SHEMA es, pues, el atributo del Verbo y le comprendemos mediante las 3 letras: Shin - Mem - Aleph que son como los elementos: Tierra, Agua, Fuego, puestos en acción por el elemento Aire (Aliento Divino).
El Logos pone en movimiento estas tres letras, que son como una materialización de un símbolo divino. Llamamos la atención sobre el hecho de que, incluso los Musulmanes, tienen en las iniciales el nombre de su Gran Profeta, estas tres letras Madres Alí - Mohamed - Soleimán.
Es preciso indicar que el Meshiha (valor 360) es el SheMA (Esquema) de los SheMaiM. Con las variaciones sánscritas, caldeas o védicas, MeShIaH, vale 358, cifra que preside el diámetro solsticial, eje de los polos del Doble Universo (Año Lunar: ShaNaH que es igual a 358).
El valor álgebro-ideográfico de los glifos del alfabeto hebreo, está hecho de tres capas de penetración profunda, cubiertas bajo el sentido vulgar de la superficie del roce (sentido demótico). En el orden de una ocultación creciente, las capas son "Hierática", "Jeroglífica" y "Alquímica", portando iniciación al vestíbulo del Templo, al interior del templo, y, por fin, al Santo de los Santos, respectivamente.
Sin embargo, una indicación y el "Signo" figuran hasta en los cálices de la Iglesia; es la "Palabra Encontrada de Nuevo", que es la CLAVE de toda Sabiduría. Esta "Clave" tiene un gran valor en las sociedades secretas, y no está vedado el darla a conocer aquí ya que es necesario para ello conocer la manera de pronunciarla en las seis direcciones fenomenales, con las pruebas de su perfecta comprensión, sin lo cual el hecho de conocerla queda sin valor. Esta clave es el término: I.N.R.I.
Podemos ir todavía más lejos, analizando este término célebre: (véase para ello mi obra Una Matesis de Psicología, Yug, Yoga Yoghismo).
Su primera letra ("I") es la clave mayor del Alfabeto Hebraico, es el YOD (el Iote en Lengua Sagrada), que simboliza el Principio Creador Activo y la Manifestación del Poder Divino (Emblema del Primer Arcano).
La segunda letra ("N") es NOUN, molde de todas las formas, está generalmente simbolizado por las Dos Urnas (Arcano XIV).
La tercera letra ("R") es el RESH (Rasith): Unión de los Dos Principios y perpetua transformación de las cosas creadas (Arcano XX).
La cuarta letra, como para cerrar un ciclo, es todavía el YOD, como símbolo de amor al Principio Creador. Se encuentra repetido para significar lo que ha emanado y remonta sin cesar para brotar de nuevo y siempre (Arcano X).
Este I.N.R.I. que se encuentra en todos los problemas Iniciáticos, está también incorporado en la física kabbalística, así como en los principios esotéricos de la investigación hacia la Identificación. Es como el sello divino, que marca los nombres donde se encuentran encarnados los Sacramentos Superiores.
Simboliza los 4 elementos en Hebreo: IAMMIN (El Agua), NOUR (el Fuego), ROUAH (el Aire), IABESHEH (la Tierra), generalmente interpretado por el axioma latino: "IGNE NATURA RENOVATUR INTEGRA", (Es por el Fuego que se renueva la Naturaleza), lo cual puede ser comprendido como un emblema de la Transmutación.
No es exactamente por una "Coincidencia" que el Gran Nazareno haya sido crucificado con esta inscripción.
El Fuego interno (la Fe), devora el elemento indispensable para transformar la Naturaleza; es el calor de la devoción, que cambia las fuerzas físicas en energía espiritual. Esta transpolarización se encuentra a la base de todas las investigaciones de perfeccionamiento, enseñadas por las Grandes Escuelas del Pensamiento.
Dejemos a los ocultistas el cuidado de descubrir el misterio, en cuanto al mecanismo esotérico de estas 4 letras, como por ejemplo, el valor de la "I", según los alfabetos Sagrados que le dan el poder de la "J" o de la "Y". Así la traducción: "Jesús Nazareno Rey de los Judíos" está lejos de ser equivocada, pero se podría decir mejor todavía: "Jeshú el Nazarith Rey de los Iniciados" o igualmente "Yoghi Nazareum Rex Initiatus". Por otra parte, estas 4 letras se encuentran en el nombre de otros Grandes Instructores tales como IQUYNGARI (iquYNgaRI), el Rey de los Tarascos en la Ciudad de Petatzécuaro en la antigua civilización mexicana. El Popol-Vuh, Libro Sagrado de los Maya-Quichés, habla de HUNAHPU en los términos de "Jefe Niño Rey de la Justicia" (en donde vemos una vez más aparecer las iniciales I.N.R.I.).
En fin este Tetragrama se encuentra en las diversas enseñanzas y la unificación de estos axiomas demuestra, una vez más y para siempre, el trabajo de transmutación que se debe de hacer sobre sí mismo, ya sea mediante la Fe o mediante la energía consciente como resultado de un verdadero razonamiento, pero siempre con la finalidad de una AUTO-REALIZACION, en otras palabras, el YUG.
La YOGA es, ciertamente, el sistema más antiguo que proporciona la lección necesaria para la obra que se ha de realizar sobre sí mismo para la reintegración en la Conciencia Universal.
Marcel Herbert (Profesor del Instituto de Estudios Superiores de Bruselas) califica el fenómeno de la Identificación (el YUG) como sigue: "es un voltaje de fuerza psíquica, gracias al cual se produce este centro principal de conciencia, que nos permite decir YO y controlar y dirigir las incesantes asociaciones de imágenes, de ideas de sentimientos y de impulsos que constituyen nuestra Vida”.
Es necesario, sin embargo, impregnarse seriamente de las lecciones de los Rishis, de los Gurúes y de los Mahatmas para seguir a los orientales en sus concepciones, pues hasta las palabras toman un giro diferente y sitúan al investigador sobre un camino falso.
El término SRISHTI por ejemplo, contiene las ideas de “expresiones”, de “concepciones” y de “resplandores”; es la producción de la manifestación. Es cierto que existe una diferencia entre la Materia y la Substancia, pero estas terminologías toman un sentido muy sutil en sánscrito. NAMA, que literalmente quiere decir “forma”, es el lado esencial de un Ser. NAMA y RUPA serían, respectivamente, la “forma” y la “materia” (mejor dicho, la esencia, y la substancia); más aún, lo inteligible y lo sensible. La materia es MATRA (literalmente: medida y etimológicamente equivaldría a “Materia”. Esta medida no es la “Materia” de los físicos, sino las posibilidades de manifestación inherentes al ATMA (el espíritu).
Los árabes tienen una palabra para designar la “medida”: HINDESAH, la cual se utiliza tanto en la Geometría como en la Arquitectura, pues consideran estas dos partes de la Ciencia como inseparables, usando el mismo vocablo para ambas; esto nos permite ver inmediatamente las diferentes concepciones, de acuerdo al punto de vista de donde se sitúen los investigadores.
Podemos añadir, en cuanto concierne a los términos de Materia y Substancia, que la Especie es la forma (o la Esencia), y los Individuos representarían la materia (o substancia). En el género particular: la Forma, en el general: la Materia. Así pues, la cantidad separa la “materia” de la “forma” y por este hecho la Uniformización no es la Unificación (ésta sería la cima del triángulo y aquélla la base).
El proceso de la creación de un mundo presenta según la tradición de la India cuatro etapas: Brahman, Brahma, Atman, Atma. Toda esta diversidad de atributos divinos desaniman a los más valientes investigadores. Tomemos por ejemplo: ATMAN, del cual los Upanishads dicen que es la esfera o PRAJAPATI (Señor de las Criaturas), y que por Su Pensamiento creó el pensamiento, emitiendo así Su pensamiento creador.
La composición de Atman se hace como sigue:
ATMA (Positivo) “Conciencia” |
BUDHI (Negativo) “Amor” |
Plan suprahumano |
MANAS (Positivo) “Inteligencia” |
KAMA (Negativo) “Sentimiento! |
Plan Psíquico Humano |
BRAHMAN es el No-Manifestado, el Principio Neutro sin formas, que es todavía "PARABRAHM".
BRAHMA es el Artesano del Mundo (el Creador); es la hipóstasis de Brahman. Es también idéntico al Atman (es también VIDYA: Realización de la Unidad con el Espíritu Supremo).
ATMAN: Principio Universal de todas las formas, es al mismo tiempo el Devata, el Aire, el Campo de irradiación.
ATMA: es el mismo Principio que Atman, pero especializado por un tiempo y en una forma particular (Sinónimo de la Unidad).
De Prajapati, El Creador, los Upanishads dicen lo siguiente: "Prajapati estaba solo y este deseo le vino: ‘Podría yo volverme varias personas y podré engendrar a las criaturas’”. El es el Señor de las Criaturas, irradiando su pensamiento creador, "pensó" (preparó) una pareja y la llevó a la existencia; fueron RAYI y PRANA (la Sustancia y la Vida)".
Esto es necesario comprenderlo, no como creación material, sino más bien "astralmente", podríamos decir; es a continuación solamente, que hacen su aparición los espermatocitos (células talón del macho, caracterizadas por 23 cromosomas) y las bocitas (células talón de la hembra, caracterizadas por 24 cromosomas). (Citemos, de paso, que se necesitan 100 cuadrillones de células para constituir un Hombre).
Abriendo un paréntesis para decir una palabra sobre el STYLONYCHIA PUSTULATA, diremos seguidamente que estas nociones científicas están en íntima relación con las enseñanzas de los Sabios Colegios de Iniciación de la Antigüedad. Esta pequeña infusión, mantenida a una temperatura de 25 grados, se divide cinco veces en 24 horas y produce diez billones de individuos al cabo de seis días y medio, lo cual representa un kilo de protoplasma. Imaginando una continuación en las divisiones del Stylonychia, la masa de protoplasma producida en 30 días sería de un millón de veces mayor que la masa del Sol.
La Fuerza generadora es potente y la sustancia una vez emanada puede ir al infinito, como lo prueba, por otra parte, este tejido de revestimiento: el Epitelium, que ofrece un fenómeno muy espectacular. Las células epiteliales cultivadas durante varios meses al exterior del ser del cual hacían parte, recubren todavía una superficie disponiéndose en mosaico como para continuar su obra, probando así un conocimiento innato del papel al cual estaban destinadas.
Estamos bien lejos de nuestra simple definición sobre el Génesis, que nos es presentada por el pequeño libro de la Biblia.
“Al comienzo Dios creó el Cielo y la Tierra”.
Esta afirmación parece necesitar algunas aclaraciones, sobre las cuales volveremos más tarde, ya que debe ser explicado con toda claridad a la luz del texto original en hebreo.
Mucho tiempo antes del Génesis hebraico los Vedas confirmaron el concepto de “el Espíritu de Dios flotando sobre las aguas del Abismo...”. Los escritos de la India Antigua afirman que este aliento divino, en sánscrito, es NARA.
Toda la Tradición Hindú está fundada sobre los Vedas: de aquí el Vedismo o Hinduismo. Recordemos todavía que la palabra “Hindú” se aplica a una unidad no étnica, sino tradicional. Se puede hablar de Budista Indio, pero no de Budista-Hindú. Los habitantes de la India (Indos), pueden ser musulmanes, igualmente, aunque la mayoría del Indostán sean “Hindúes”. La religión del Hinduismo (Vedismo o Brahmanismo) se extiende más allá de las fronteras de la India y podemos encontrar adeptos suyos en Indonesia, sin hablar de las colonias hindúes establecidas en África del Sur. Mejor nos valdrá quedarnos con la denominación original de SANATA-DHARMA (Verdad Eterna).
Numerosas son las autoridades cristianas que han reconocido el valor de esta Antigua religión, y es el jesuita W. Wallace, quien ha dicho muy bien: “El católico no se da plenamente cuenta que el Sanata-Dharma es el pedagogo natural que lleva hacia el Cristo”.
Los Vedas (Conocimiento Tradicional por excelencia) están repartidos en cuatro colecciones: Rig-Vedas, Yajur-Vedas, Sana-Vedas, y Atharva-Vedas, y constituyen el monumento más antiguo de la literatura sánscrita. Según los Hidúes, esta Ciencia Sagrada fue revelada por la misma boca de Brahm.
Cada colección consta de dos partes:
El “Mantra” (fórmula y ritos) y el “Brahmana” (enseñanza de los orígenes y de la finalidad); éste comprende también los Upanishads. Los Upanishads forman la última parte de los textos Védicos (UPA: al lado; NISHA: sentado; Upanishad: la aproximación). Estos son la parte metafísica de la Revelación y contienen los discursos de los Grandes Rishis Védicos.
La Tradición Hindú hace prueba de un gran conocimiento psicológico al transformar poco a poco, a través de las Edades, sus leyes y reglas de vida para sus seguidores. Todo ha quedado intacto en cuanto a Dios, al alma y al Universo, pero un código moral ha aparecido, de acuerdo a las épocas para regir: la ética de los Hindúes.
A estas épocas se les designa con el nombre de "YUGAS": Ciclo donde la duración decreciente (de 4 Yugas) forman un MANVATARA. Las diferentes fases de este Tiempo van en proporción de 4, 3, 2, y 1, en el cual el total de 10 simboliza el conjunto del Ciclo. La dirección descendente de la marcha del Ciclo (en tanto que expresión cronológica) es el proceso de manifestación que marca el alejamiento del Principio. Los cuatro Yugas (Chatin-Yuga) constituyen aproximadamente 12.000 años de nuestro tiempo occidental.
Este reconocimiento del alejamiento del Principio, es Sabiduría pura en los Hindúes, los cuales han reconocido la necesidad de una evolución en las aplicaciones del DHARMA (Ley, Moral, Etica).
Esto nos hace pensar que los Gurúes de la Antigua India habrían encontrado la "relatividad" de las cosas, mucho antes que los pensadores de Occidente. Escritos milenarios han probado abundantemente el conocimiento superior de los Sabios de Asia y esto en cuanto concierne a los problemas que para los científicos Occidentales acaban de nacer.
Después de los Vedas, son los AGAMAS, los libros considerados como únicos y reales, en el sentido de autoridad en el Hinduismo. Son éstas las revelaciones del Dios Perfecto. Los Vedas son en "general" y los Agamas en "especial", revelando lo esencial de la Verdad de los Vedas y de la Vedanta. Contrariamente a los Vedas que predican más bien el culto al Fuego, los Agamas dan mucha más importancia al culto del Templo, como rito externo.
(Las referencias sobre las Castas, y especialmente la cuestión de la "intocabilidad" encontrada en los Agamas modernos, son contrarios al espíritu: SIDDHANTA. Estas palabras serían las reglas de orden social en los Saivitas, incorporadas en las compilaciones por autores posteriores. Es conveniente señalar, por otra parte, que estos escritos datan solamente del siglo XII).
El mundo greco-latino es dualista y pragmático frente al encuentro de la esencia monista y mística del non-pragmatismo hindú, resumido en el desinterés absoluto pedido por los Upanishads que hacen de la renuncia a los frutos de la acción: un imperativo categórico.
El pensamiento de la India es APRAGMATICO, a la inversa de nuestra civilización: utilitaria y práctica con su sistema interesado del “Pragmatikos”.
Sin embargo la moral hindú ha debido aflojar un poco su disciplina en el correr de los siglos; la estricta observancia védica fue en cierto momento muy complicada de mantener y ha sido necesaria una doctrina más amplia para satisfacer a los pueblos. Es necesario reconocer sin embargo que no se trata de una degeneración del Principio de Origen, sino solamente una manera distinta de empaparse. Así en la 3era. Edad: los PURANAS hacen su aparición; inmensa colección y donde el objeto principal es la relación de los Avatares de Vishnú. Cada Purana trata de los 5 objetos: Creación del Mundo, Generación de los Dioses, Cronología, Historia de los Héroes y Cosmogonía. El número es de 18 y hay: un número igual de UPAPURANAS sobre los mismos temas. Anotar todavía los 2 ITIHASAS.
El RAMAYANA está consagrado a Rama-Chandra, el 7mo. Avatar, y el MAHABHARATA al 8vo. Avatar: Krishna. Este último que relata el “BHAGAVAD- GITA”, es el antiguo poema épico del Norte de la India, comparado a la Iliada. Llamado también “Sonido Celeste” o “El Canto Celestial”, el Bhagavad-Gita es el diálogo que se desarrolla entre Krishna y su discípulo Arjuna; tiene lugar poco tiempo antes de la batalla de Kurukchetra, al nacimiento de la 4ta. Edad del Mundo.
El “Gita” es como si fuera una biblia popular, es un brevario de la doctrina de los Hindúes. Krishna (divinidad bajo forma humana) instruye a su discípulo sobre lo que más le importa saber, le desarrolla la naturaleza del Alma, la definición del hombre, los deberes que debe cumplir y sobre la renuncia a los frutos obtenidos de las obras, enseñanza-tipo de la India. Esta obra consta de 18 capítulos que tratan de la diversas vías que son un poco como las partes de la Yoga, conviniendo a cada uno según su evolución. Así el Bhagavad-Gita (o también el canto del Bienaventurado) es un poco el libro inseparable de los hindúes ortodoxos.
En fin, destinados a nuestra 4ta. Edad: vienen los TANTRAS, que son más bien las reglas del conocimiento terrestre. Estas Enciclopedias del Saber del “Kali-Yuga”, son las descripciones de los orígenes del mundo hasta las leyes que gobiernan las sociedades. Parece que el “tantrismo” se ha manifestado sobre todo y más especialmente en el Tíbet, aunque nacido en la India; por otra parte, hay que añadir que en Europa, las prácticas similares a las tradiciones tántricas fueron desde hace mucho tiempo puestas en práctica por los ocultistas.
Los Lamas reconocen cuatro clases principales de "Tantra", que pueden describirse como sigue:
Tantra que expone la última Verdad, teniendo su origen probablemente en el Este de Bengala, al principio de la Edad Cristiana.
Tantra de las Ciencias Místicas, que toma forma en los siglos II y III de la era cristiana en la India meridional.
Tantra de la Shakti, atribuído al Maestro Lawapa, de la región de Odyana (Afganistán). Los tibetamos recibieron esta clase de Tantra a través de Padma-Sambhava; fue también este "Precioso Gurú" quien se supone formuló el sistema de pensamiento llamado de los "Gorros Rojos" que constituye la Escuela primitiva de Ningmapa, tan potente en el Tíbet, donde las Escrituras son casi inexistentes, afuera de los monasterios.
Tantra de Kalachakra el cual habría tomado nacimiento en el Norte.
Se encontrarán informaciones precisas en los "Siete Libros de la Sabiduría del Gran Sendero" del Lama Kasi Dawa Samdup.
Resumiendo, nada parece haber escapado a los Gurús de antaño y un hecho es neto, claro: es el Espíritu (o Conciencia) que es la sola Realidad, como el Único-Sol a los múltiples rayos, igualmente el Espíritu será Único y se manifiesta en numerosos espíritus.
Todos estos grados, estos planos, estos peldaños en la Tradición; estos conceptos, redactados, resumidos, retransformados, no son más que las etapas de una misma Lección puesta a la disposición de los hombres, según las consideraciones de lugar y tiempo.
El Dr. W. Y. Evans-Wentz en su obra "El Yoga Tibetano" publicado por la Universidad de Oxford ofrece una documentación digna de mayor atención. En lo que concierne a "El Espíritu y Maya" (página 26) aclara muy bien la cuestión como sigue: "El Macrocosmo no se puede separar del Microcosmo como ni el Único ni el Múltiple pueden tener una existencia aparte el uno del otro estando el aspecto individualizado o personal en el espíritu microcósmico (o conciencia) asume en su propio interior, el ego (o alma o el yo): es ilusorio. Lo que no está iluminado ni espiritualmente despertado a la percepción de los fenómenos, depende (por su carácter personal ilusorio) del sentido de separatividad y también de la interminable corriente de las impresiones sensuales provenientes del contacto con las formas y con el universo externo. Así, los fenómenos dan una existencia relativa al ego, frente al mundo que el ego percibe en daño, como alguna cosa afuera o aparte de él. En otros términos, el ego y el mundo no tienen una existencia absoluta y verdadera sino relativa. De esta manera el ego o el alma no es más real que un reflejo de la luna sobre el agua, es una sombra, un fenómeno compuesto proyectado por la realidad, pero el espíritu microcósmico (no iluminado) lo cree una cosa permanente y existente por sí mismo”.
Llegamos, pues, a comprender que nuestro pensamiento juzga según las apariencias y nos atamos a cosas que de hecho son ilusorias, inexistentes en hecho; es pues tomar los efectos por las causas y los fenómenos por los númenes. Es el espejismo, la ilusión, base de la doctrina del “MAYA”. El principio del Maya no se limita solamente a la filosofía sino a la física misma; la materia es no existente, salvo como fenómeno, en tanto que es manifestación de la Energía primordial, constituyendo el electrón donde el manantial último es el Espíritu. La materia, como todas las cosas aparentes, es ilusoria. Las Doctrinas Secretas han establecido este concepto desde hace mucho tiempo, que nuestra ciencia empieza felizmente a concebir. Los Archivos Esotéricos del Oriente contienen numerosa documentación sobre estos puntos, en que el Universo externo es un compuesto psíquico-físico del Espíritu y en que la materia, tal como nosotros la vemos, es una cristalización de la energía mental y en consecuencia: el producto del pensamiento.
Es ahora que la Ciencia occidental ha alcanzado la idea acerca de la realidad de los Sabios del Oriente. La exposición de Sir James Jeans “The New Background of Sciencie” (Universidad de Cambridge, 1933, página 283) es muy educativa. Escribe al respecto con referencia a los últimos descubrimientos de la física: "Hemos visto mucho más que la suma del espíritu a la materia, la completa desaparición de la materia, al menos de ésta en la que los antiguos físicos construían el universo objetivo”. Más lejos, hablando de la Ciencia de nuestros días, añade: “Al punto más lejano que haya podido llegar, mucho y quizás todo, lo que no era mental desaparece ya nada nuevo ha venido que no sea mental”.
Podríamos todavía mencionar aquí la obra muy metafísica el “Kybalión” la cual en su exposición filosófica, no es menos una aclaración muy científica. La materia escapa en un cierto momento a la investigación, y fue esta una de las últimas conclusiones igualmente, de Albert Einstein. Por su parte el TAO-TE- KING anuncia esta verdad desde su IV capítulo: “El Tao está vacío y, sin embargo, El es inagotable. ¡Qué abismo!”.
Este vacío abismal, considerado como atributo del Tao, tiene el mismo sentido que el “No-Ser” (un poco como el Ain-Soph de los Kabbalistas). Dice también en el capítulo XVI del Tao: “Alcanzar el vacío perfecto, es fijarse firmemente en el reposo.... Pues cualquiera hace en él, por la abnegación: la nada y el vacío y hace el ser y la Vida...”.
Cualquiera se deshace en el Espíritu Puro, transubstancializa su personalidad en la personalidad de Dios, viviendo de su Vida Infinita y de su felicidad sin límites.
Sir James Jeans dice todavía: “Nuestra última impresión de la naturaleza, antes de haber retirado nuestros anteojos, era la de un mar de mecanismos que nos rodeara por todas partes. A medida que hemos abandonado nuestros instrumentos ópticos, hemos visto los conceptos mecánicos, ceder la plaza a los conceptos mentales. Si por la naturaleza de las cosas nosotros no podemos llegar a deshacernos completamente, nosotros podemos concebir que el efecto sería la desaparición total de la materia y del mecanismo y el espíritu quedaría solo soberano”.
Esto define al Maestro en Yoga que ha logrado deshacerse de los anteojos y que desembarazado de estos atributos, hace tiempo ha “realizado” que el Espíritu es el verdadero poder.
Estas consideraciones de los hombres de Ciencia, aceptadas oficialmente en nuestras Universidades, demuestran plenamente la evolución que se produce, después de algunos años, y prueba que se puede tener esperanzas en un regreso a la Sabiduría Antigua y que en esta nueva Edad, se acusa de una manera cierta, una elevación hacia la Sabiduría.
FILOSOFIA CIENTIFICA
Nos habíamos propuesto analizar la cuestión del Origen al claror de los textos bíblicos.
Moisés escribió el Génesis como sigue: “BERESHIT BARA ELOHIM ETH HA SCHAMAIM V’ ETH HAARETZ", lo que fue generalmente traducido por "Primeramente Dios creó el Cielo y la Tierra!...”
Se ve mal la procedencia de tal enunciado, aunque la traducción corriente de dicha demótica propone: "Al principio, los Elohims crearon el Cielo y la Tierra".
Volvamos al texto original en hebreo, el único que podemos considerar seriamente. Remarquemos en principio que la primera palabra del Génesis empieza con una "BETH" y que este valor femenino (una matriz) está escrito con una mayúscula, (poco usada en estos tiempos) lo que transforma la inicial "B" de un valor de 4 a 10. Así la primera palabra: "Bereshith" que vale 685 está transformada inmediatamente en 10.585 que es el valor secreto de 145 (el cual es igual a 29 veces 5, prueba importante como simple numerología). (Consultar tabla de valores esotéricos en el Propósito II).
El número 10.585 es la forma secreta de Bereshith (y de 685) después de la conversión de 4 ("beth") en valor esotérico de 10. Este número es el valor secreto de 145, hemos dicho, lo que hace sumado con 83 (valor de "Elohim"), el número de 228. Así en el sentido oculto del SIPHRA-DI-TZENIUTHA, el primer verso de la Biblia (Al comienzo... mejor dicho "Al principio...") empieza por un símbolo hexagrama: SEIS, en el Principio (Bereshith). El creó SEIS (Bara- Schith) y 228 es igual a SEIS veces 38 y además producto de 145 (cuyo valor secreto es 10.585 y es también 29 veces 5) más 83 (el número de Elohim) que es el inverso de 38 (el símbolo del "Principio de Allá-Arriba").
Este número 38 es de los más importantes en esoterismo con el número 29 (el Principio de Abajo), 38 es la Vida Intermediaria (celeste o cósmica) y 29 es el Cristo Terrestre (la Vida rebajada, la tierra antes de la sumersión).
Es necesario remarcar también que 685 está compuesto de 6 (con el 8 central, que es el punto de partida de un nuevo ciclo parcial 8 ↔ 9, que es la madre Universal). Ocho es el 2 a la tercera potencia; es todavía el arquetipo del poder involutivo en acción (apilamiento de las formas). Tenemos 6, después 8 y al final 5.
Seis (daleth) es el símbolo de la naturaleza divisible; realización de involución por organización interna del Alma Universal (el 4 da cuenta de esto, mientras que el 5 hace mover) (38 por 6 es 228) "SEIS en el Principio" dice el Zohar. Seis es a tres lo que dos es a uno.
Ocho es la acumulación de las formas ("He" en hebreo).
Cinco ("Guimel") es toda la vida de acrecentamiento y de magnitud, es el signo EXISTENCIAL. Con 5 la cadena de calidad se atrae por 3 (poder), 4 (acto de manifestación isotrópica), 5 (existencia anisotrópica).
En el "Sepher" el cuadrado de 5 hace acción sobre Ain-Soph y el cubo de cinco: Kether, es el pasaje de lo inconocible a la Manifestación.
En lectura kabbalística tenemos pues, 5, después 8 y al fin 6; es el número estructural en química, caracteriza el fósforo de magnesium, el bromuro de cobre, la antracina, la pentaritita, la urotropina, el terpense en los aceites esenciales de plantas, el agua oxigenada, la betaína y el filopirol.
El mecanismo de 56 significa la oscilación entre dos estructuras sobre la base del fenómeno ferromagnético (orientación del compás brújula).
No es necesario extenderse sobre la primera palabra del Génesis... los profanos podrían cansarse, los otros han comprendido desde hace tiempo la importancia de este PRINCIPIO (Bereshith).
Olvidemos pues la palabra de Principiación de nuestras biblias habituales para comprender, más allá del término, un elemento primordial digno de la Divinidad ("No hay comienzo, no hay fin", se dice por otra parte en esta Biblia). Así optemos por un Principio Abstracto o bien una abstracción de principio…
En lo que concierne a la segunda palabra del Génesis, hemos visto ya que era preferible traducir el término "BARA" por "emanación" más bien que por "creación". Dios no puede haber pensado en "crear" un mundo, esta cualidad antropomórfica no le conviene y es más plausible pensar que una emanación está hecha de Su Principio. Si tomamos el radium, por ejemplo, que emana sus radios "alpha", "betha", "gamma", podríamos situar el hecho en el origen de una Fuente Divina que habría emanado en la Santa Trinidad.
Elohim, tercera palabra del Génesis, no se puede discutir como que está agregada a Dios, pero finalmente tampoco, el término "Elohim" puede ser traducido por la palabra Dios, sin una explicación. Ciertamente es un atributo divino, pero veamos otro caso: ¡Qué lejos de ser I E V E (Yod-He-Vaw-He) lo que se nombra exotéricamente como Jehová, que como hipóstasis, constituye un atributo de Ain-Soph. IHOAH se escribía otras veces AE-HOAH como fue citado precedentemente. El pueblo ignorante pronunciaba "Iehovah", interpretación que es más que una calamidad, pero como la pronunciación que resulta de los puntos más fonéticos hacen desconocida o altera odiosamente la significación, no está admitida en las sinagogas, para proteger la interpretación original de las palabras, de ese hecho y de ese género de escrituras.
Para terminar en esta idea, digamos que sería necesario tomar palabra por palabra de nuestras Escrituras, antes de aceptar o rechazar los textos, antes de comprender mejor el sentido y para impregnarse más de la Verdadera Mística.
El Zohar dice: "El MI era de un brillante insostenible, que ha debido encerrarse en el manto de ELEH para no destrozar el mundo". (Esto se explica por el pasaje del "Mem" abierto al "Mem" cerrado, que de 30, valor esotérico, pasa a ser 40, valor guamétrico). (Ver tabla de valores numéricos en el Propósito Psicológico II).
ALHIM (Elohim) da 1, 30, 5, 10, 40 y así trae los números a pequeño valor y por permutación (operación de la Temoura, que consiste en hacer permutaciones entre las letras de una palabra para sacar un valor) se leerá: 3,1415 o también como símbolo "PI" (fórmula universal). Este símbolo para representar la relación de la circunferencia con el diámetro define bien el atributo emblemático de Dios, que va a ponerse en manifestación con el Universo.
MI (significa "QUIEN") valor 48, es la palabra que según la Qabbalah habría creado el mundo; es la cuestión clave del Zohar: ¿QUIEN ha creado esto? La respuesta es: ELETH ("estos": valor numeral 35), la vestidura que es la SHEKINAH, esta onda resplandeciente y preciosa que corre a través de los Séphiroths.
El valor 35 es la cifra del "último velo" que separa el mundo de la pre- manifestación de "éste", de la manifestación. Valor de "ELETH", suministrado por 2 a la tercera potencia, MAS 3 a la tercera potencia, o todavía el Padre (18), la Madre (8) y el Hijo (9) igual a 35, símbolo de la creación en relación al Principio Creador.
La respuesta "eso", es también igualmente "éstos", (Padre – Madre – Hijo) y 18 es naturalmente el valor esotérico de YOD, que constituye el signo de Toda-Potencia manifestada y del punto brillante original (este YOD inicial es el opuesto de 81: el Yod terminal).
Todo eso, según el complejo enantiomórfico.
La palabra "enantiomórfico" necesita, sin duda, una explicación para algunos. El enantiomorfismo es un término de la ciencia actual para definir la mezcla simétrica y asimétrica, que caracteriza todo dipolo vital. Esta propiedad está unida, por ejemplo, a la ciencia qabbalística de las permutaciones.
En cristalografía, se dice que dos cristales isómeros, simétricos del uno al otro, por relación al plano, y no superponibles, son enantiomórficos.
Pasteur había ya reconocido la ligazón existente entre la diferencia de orientación geométrica de dos cristales (o "hemiédricos") y la inversión de su acción sobre el plano de la polarización de la luz.
Estas investigaciones han dado el nacimiento a la teoría del carbono asimétrico que es el origen de todas las teorías estructurales de la estereoquímica contemporánea2.
En fin, con la Qabbalah penetramos un poco en este mundo de los misterios que está generalmente mantenido oculto por las otras religiones. El esoterismo de la Teología hebraica hace ver de golpe verdades sublimes. Llamada Teosofía Judía, no tiene ni dogma ni artículo de fe, es una verdadera religión en el sentido exacto del término.
Por otra parte, terminamos este capítulo dando la definición de la palabra "Religión" hecha por el Profesor BOUCHER, Psicólogo de las Escuelas Normales de París: “Veneración y Amor por un Ideal hacia el cual tienden a la vez todos los impulsos del corazón y todos los esfuerzos de la vida cotidiana. Es una especie de síntesis de todos los sentimientos del individuo, especialmente de sus sentimientos intelectuales, estéticos y morales, sentimientos vastos y complejos dominando a la vez su vida intelectual, afectiva, y su vida activa. Un Alma religiosa no es necesariamente un alma que tiene tal o cual creencia, un tal dogma, que adora esto o aquello, de tal o cual manera, es, ante todo un Alma en la cual un ideal Superior de cualquier manera que se represente o con cualquier nombre que se le llame, se ha apoderado de todos los resortes sentimentales y activos, ha subordinado todas las inclinaciones secundarias y dirige la vida entera del individuo”.
EL MISTERIO DE LOS NÚMEROS
Habéis arreglado todo con medida, con Número y con peso. (Sabiduría XI-20).
Todo lo que es glorioso será recubierto de un velo (Isaías 4, 5 égal LUC. XII-12
En el Libro Uno del Zohar (118, a.) se hace este anuncio profético: "El Santo bendito sea, no quiere que los misterios sean divulgados en este mundo. Pero cuando se aproxime la época mesiánica, incluso los niños conocerán los misterios de la Sabiduría, sabrán todo lo que debe ocurrir al final de los tiempos, gracias a los cálculos".
Creemos necesario que al llegar a este estado de nuestro desarrollo, hagamos una pequeña recapitulación del valor simbólico de los números. Para los que no están todavía familiarizados con esta clase de operaciones sería conveniente hojear las obras de Saint Yves d'Alveydre, Fabre d'Ollivet y especialmente las obras más modernas de Abelio y en particular, "La Biblia, documento cifrado", que ofrece todas las referencias deseadas.
Alejemos de nosotros la idea, en este cuadro limitado de hacer una exposición extensa sobre la significación de los números, sino más bien en un orden útil, establecer un pequeño cuadro que venga a ilustrar más ampliamente las citaciones ya hechas, y en particular, documentar mejor sobre los valores cabalísticos en apoyo del cuadro de números, en relación con las letras hebraicas, ya ofrecido en el Propósito Psicológico No. II.
Añadamos, antes de empezar las explicaciones, que éstas deben ser entendidas según los tres sentidos. Una primera "clave" señala el valor esotérico de las letras; una segunda, el valor secreto de los números y, finalmente, una tercera, acerca de la transmutación de los elementos. Así la letra "A" (Aleph), no concuerda con la unidad en su dosis esotérica, pero en ella se aplica el 3. Por lo tanto la A es el 1, sólo en el orden numeral del alfabeto o en el sentido guamétrico simple, como lo hemos visto anteriormente.
Ninguna meditación es posible sobre el número Uno. El movimiento empieza con el dos, cuando al nivel del Sí, aparece la conciencia del Sí, quien da la llamada al resto del ternario por la acción del conocedor, de lo conocido y del conocimiento. (Progresión del Padre, Hijo y Espíritu Santo, Brahma-Vishnú- Shiva, etc.).
Para empezar la encarnación es verdaderamente necesario el cuatro; para la terminación: son los dos ternarios que deben afrontarse y es el nacimiento del seis (realización de la creación). También desde el principio del Génesis se hace mención de estas Seis Etapas (los 6 días); desde la primera palabra bíblica: "El creó Seis" (Bara-schith), seis palabras, seis zonas, etc.... Está escrito textualmente: Baereschith: Seis en el principio...
1 - UNO, no es un número y no puede por esta razón estar figurado simbólicamente; sería el centro indeterminado de un círculo cuya circunferencia no estaría en ninguna parte. En hebreo "Ehad" (Aleph-He-Daleth) y la raíz (He- Daleth) del cual está formado y que se toma por la unidad misma, significa: una punta, una cima. Es la división detenida como el alto de una pirámide. Representa la Principiación y la estabilidad.
2 - DOS, tampoco puede estar figurado; se le podría considerar como el diámetro de un círculo cuya circunferencia no estaría en ninguna parte, es decir, una recta de dirección indeterminada y de dirección indefinida que corta el plano en dos zonas. El dos es incongnoscible expresando de todas maneras la dualidad abstracta, equilibrada y estática. Con su raíz (Shin-Zain) es el ser producido, la idea de la mutación, de transición, de pasaje de un estado al otro. Distinción y Transición.
3 - TRES representa la primera letra del alfabeto hebraico "Aleph" en su valor esotérico, es el punto central original y sin embargo incognoscible, al cual su desarrollo según la trinidad 1 ↔ 1 ↔ 1 y su paso a 111 (ciento once) le sitúan al centro de la Ciencia Numeral.
Tres es el signo de potencia original o del Ser Absoluto. Se le llama el "Numero Potencial". El es valor secreto3 de dos. Ligado también a 561 toma una gran importancia en la sexualización de los números; polarizando el valor secreto de 33 (que es 561) se obtiene 165 y añadiendo a este número el 3, queda 1.653 que es el valor secreto de 57 (el Ha-Adam).
Tres (Aleph) es el elemento "Aire".
Está formado de dos raíces contraídas (Shin-Lamed y Lamed-Daleth-Shin) tan opuestas en sus significaciones como en la ordenación de los caracteres que las componen. Por la primera raíz es "extracción", por la segunda es "amalgama". Tres, significa en hebreo, la nueva forma de idea de las posiciones encerradas en uno y dos, que vienen a ser, pues, una especie de unidad relativa. Se comprenden mejor, entonces, todas las formas triológicas religiosas, por ejemplo. Es la imagen de la salvación, de la perfección, de la paz y de la felicidad eterna. Significa en resumen: Extracción y Liberación.
4 - CUATRO representa la segunda letra del alfabeto hebraico: el "Beth", es el número de la acción interior. Es el de la vida isotrópica. La Matriz de las matrices. Se le hace concordar a veces con la raíz: AB (con valor esotérico de 7) a causa de su idea de progresión y fuerza productiva, aunque sería más próximo a la raíz BA, que da mejor la impresión del movimiento. Beth es la cuna.
El cuatro da cuenta de la dualidad activa, es el círculo puesto en rotación por la cruz. Cuadrado de dos, es la primera exaltación de la dualidad, el arquetipo de la involución en potencia del ser. Beth simboliza también el baño.
Se sabe también que el tetraedro (sólido de cuatro caras) engendra el cubo, el octaedro, el dodecaedro y el icosaedro. Estos cinco sólidos platónicos, simbolizan en la mitología antigua: el Conocimiento total e integral, que comporta la Identificación con el Unico y donde la creación se ha revelado en ella misma.
Este número se manifiesta enteramente en el Tetragramatón (vocablo de cuatro letras representando el nombre de Dios. Referirse a la palabra IEVE).
El Beth, aquí representado, es la primera de las siete letras llamadas dobles; ésta corresponde a Saturno en el mundo, el sábado en el año y la boca en la persona. (Ver el Propósito Psicológico No. II, página 17, croquis I y II).
En hebreo: es Aleph-Daleth-Beth-Ayin, cuya raíz Daleth-Beth impulsa toda idea de fuerza y significa sobre todo: Multiplicación.
5 - CINCO representa la tercera letra que es Ghimel y es el signo Existencial y con él toda idea de acrecentamiento y de magnitud; es la vida expansiva y la cadena de las cualidades, que se inicia de este modo: 3 (potencia), 4 (acto y manifestación isotrópica), 5 (existencia anisotrópica y ciclo existencial). El operador cinco aparece siempre para caracterizar el Alma Universal.
29 veces 5 es igual a 145 (cuyo valor secreto es 10.585 o forma esotérica de la palabra Baereschith).
Ghimel es el signo de la vida orgánica y el número cinco (con 13 y 14 en el mismo orden de ideas) tiene un papel considerable en el mecanismo sefirótico. El cuadrado de 5 anima el Ain-Soph y el cubo de 5 anima a "Kether". Es el pasaje (del cuadrado al cubo) del Incognoscible al Manifestado.
Según el Sepher Yetzirah, fue creado con Júpiter, el domingo y el ojo derecho. (Ver dibujo en el Propósito Psicológico II).
La palabra Taw-Mem-Shin expresa un movimiento de contracción y de aprehensión, como los cinco dedos de la mano cogiendo una cosa. Indica, pues, expresamente la cualidad de Comprensión.
Ghimel, simboliza aun la feminidad desflorada y maternal. Ofrece la imagen de un canal; es el signo también del envolvimiento maternal y emblema de todas las ideas que se derivan de los órganos corporales o de sus acciones.
6 - SEIS representa la cuarta letra del alfabeto hebreo, el Daleth. Es el símbolo de la naturaleza divisible y dividida. Es la realización de la involución por la organización interna del Alma Universal, en cuyo caso el cuatro rendía cuenta y el cinco empezaba a animar. El ciclo 3 ↔ 4 es el arquetipo del ciclo 5 ↔ 6. Viene a menudo a poner el sello de la Organización y de la realización; 38 por 6 igual a 228 (el cual es también producto de 145 más 83); en el seno de este total, el Demiurgo confunde (38 y 83), el "principio de Arriba" con "Elohim". Hemos visto ya la importancia del 145; en cuanto a 228, viene a serlo también en la filosofía budista (ver mi libro "Misticismo en el siglo XX", Quinto Mensaje).
En el primer versículo del Génesis, la importancia del 6 aparece enseguida. "SEIS en el principio"; está dicho: "El creó SEIS". Es la medida sagrada empleada con autoridad por el Creador. Se remarcará que es el símbolo de la letra Daleth, la cual, se recordará, es la palabra que conduce a la unión divina. En efecto, en las ceremonias místicas, cuando se celebra la Misa Cósmica, es este término el que es pronunciado por el oficiante para establecer el equilibrio entre los dos mundos, es el emblema del vínculo, (el Yug) entre el macrocosmo y el microcosmo. El glifo "Daleth" se presenta como una escuadra (rectitud en las sociedades secretas) y trazado en el espacio de cuatro maneras diferentes (a fin de unir los 4 elementos del organismo con los 4 elementos de la naturaleza) por las manos del Mago, viene a ser el principio que forma el vínculo entre los asistentes y los planos superiores. El signo así hecho, realiza una cruz (a doble línea interior) que los sacerdotes actuales practican todavía como bendición, sin conocer siempre la verdadera significación esotérica.
Digamos todavía que el "Daleth" es el signo de la naturaleza divisible y dividida, y expresa toda idea que dimana de la abundancia nacida de la división. Su valor numérico: 4, designa la Comunidad de Israel, siendo ésta idéntica, cuando está glorificada, al Tetragramatón Yod-He-Vaw-He; ambos no hacen más que uno, asimilado también al Adam-Kadmón. El Daleth en el Pentateuco se escribe con carácter más grande que las otras letras, para simbolizar la comunidad de Israel, cuando ésta se une a los dos grados supremos de la esencia divina caracterizada por "Aleph" y "Heth" (Zohar I. 262 b).
Sabemos que es igualmente el seis, el que compone el Sello de Salomón (dos triángulos entrelazados): esta estrella tiene seis ramas, es un símbolo cuyo valor sagrado no es necesario comentar.
Seis es el compuesto de la medida de los materiales (5) y de la operación del Demiurgo (I). Según el "Sepher" fue creado con Marte en el Mundo, el lunes en el año y el ojo izquierdo en la persona.
En fin, 6 es a 3, lo que 2 es a 1. Es la Medida Proporcional.
7 - SIETE, que a pesar de su carácter sagrado hace parte de los números humanos: 7 es igual a 3 más 4, y es esto lo que le hace "proceder" de los números divinos. Puede ser simbolizado por la serpiente mordiéndose la cola, pues es el símbolo del infinito numerado en su regreso al principio. (Ver en mi libro "Los Centros Iniciáticos", Segundo Mensaje, el mecanismo del Número Mágico).
El cuadrado y el cubo de 7 se prestan a combinaciones múltiples. Por ejemplo, la relación entre 35 (5 veces 7) y 49 (cuadrado de 7); 35 al cuadrado: 1.225 que es el valor secreto de 49. Además 1.225 está en relación con 325 (valor secreto de 25, 5 al cuadrado, de ahí ese enlace entre 5 y 7). Notemos todavía que 225 es el cuadrado de 15 (Valor Secreto de 5) y 225 es el número que representa el Metatrón (Gobernador del Mundo de aquí abajo).
Siete es un número helicoidal, de tal modo que trazando una línea ascendente en forma de espiral sobre la superficie de un cono, dividiendo la espiral en seis trozos, el séptimo resultará del avanzamiento AB, capitalizado en el espacio durante el desarrollo de los seis otros.
Es obvio insistir sobre toda la simbología del septenario, de la cual los estudiantes de ocultismo conocen todo el carácter.
Siete es la idea del complemento, de consumación de las cosas y de los tiempos. En fin, se puede definir por Consumación, Regreso.
8 - OCHO, que en principio representa la letra "He", es el punto de partida de un nuevo ciclo parcial (8 ↔ 9). El 8 es la Madre Universal, encerrando en su seno el conjunto de los seres nacidos de la multiplicidad. Tercera potencia de dos, este número es el arquetipo de la involución en potencia de acto. Se encuentra el ejemplo de su bipartición con la palabra Bereschith: esta vale 685 (sin contar su carácter particular de la Beth inicial o su forma secreta de 10.585) pero 64 45 que se descompone según 1 más 54 ↔ 45, es decir la adición de la Unidad y del complejo enantiomórfico.
Ocho es el amontonamiento de las formas.
La quinta letra (He) contiene la idea abstracta del ser, como igualmente la primera letra del alfabeto (Aleph), pero esta vez, después de la realización.
Especifica el estado de la feminidad virgen, no desflorada, pero desflorable y fecundable (Diana); en fin, la letra "He" es el signo de la Vida y de toda idea abstracta del ser en general.
9 – NUEVE es un signo intelectual, procede del 8, como el 6 del 5 y el 4 del 3. Un signo convertible universal (según Fabre d'Olivet). El Número del "Hijo" en sus dos actividades: bajada primero (separación del Principio), subida después (incorporación al Principio).
En todo complejo enantiomórfico la distancia al seno del reflejo-reflejante es siempre un múltiplo de 9. La función de reducir a nada, está pues, toda entera contenida en este número y sus múltiplos. Su simbolismo, como representando "el Hijo" es de los más significativos. Fabre d'Olivet, quien no da este valor de 9 a la letra "Vaw", dice, sin embargo, que esta letra es un factor convertible universal entre el Ser y la Nada y la Nada y el Ser. Se sabe que la letra Vaw servía principalmente en la puntuación del hebreo rabínico; es quizá la letra más vocalizada!.
Esta sexta letra ofrece la imagen del misterio, el más profundo y el más inconcebible, la imagen del nudo que une, o del punto que separa, la nada del ser.
Un antiguo axioma esotérico dice que el 9 no hace otra cosa fundiéndose en el 10, que perderse en el cero para realizar nuevamente el milagro de la Unidad. Nueve es el pasaje del Espíritu a la materia, el símbolo de la encarnación y de la transmutación.
La raíz Shin-Ayin en hebreo significa: cal, y el número se agrega así a todas las ideas de cementación y de conservación. Es el emblema de la Restauración.
10 - DIEZ es la fijación de dirección determinada en el Todo. Su valor secreto es 55. Diez es la expresión dinámica de la Unidad, es Dios en potencia de acto. Es la fuerza liberada por el lanzamiento, toda idea de tensión resuelta. Al Padre, simbolizado por el "uno", se añade el 9 "el Hijo", para obtener un total que comprende la Unidad, pero la unidad modificada por la exterioridad del cero, que es el símbolo de una distancia nula e infranqueable al seno del Ser. Diez encierra el conjunto de todas las cifras, es un ciclo cerrado al cual no hay nada que añadir, es la década mística de Pitágoras, la suma que expresa el Misterio del Cosmos entero.
Es la séptima letra del alfabeto hebraico la que está caracterizada por el diez. Esta letra que es el "Zain", imita el ruido de la flecha que corta el aire y marca la dirección de un objetivo particular. Está considerada como teniendo un valor ideográfico de acto de coito por contacto. Es un signo demostrativo, una imagen abstracta del vínculo, que une las cosas.
El 10 es el emblema de Agregación o, aun, la Potencia Reformatriz.
11 - ONCE, que estaba representado en los antiguos Tarots egipcios por la persuasión, es la unidad que intenta persuadir de su efecto materializado.
12 - DOCE, cuyo valor secreto es 78; es el constituyente de la palabra "Aour" (palabra hebrea que significa "Luz"), valiendo ésta, 132.
El doce se emplea a menudo en la mitología antigua para manifestar un ciclo terminado, pero animando la actividad. Caracteriza la octava letra: "Heth" que efectúa el regreso dialéctico necesario, situando el obstáculo delante del esfuerzo, la fatiga unida a la existencia, después la confirmación de alternativa del Zain. Expresa las ideas de equilibrio y antagonismo al mismo tiempo. Es la letra que especifica la feminidad desflorada, no fecundada (Afrodita); signo de la existencia elemental, ésta ofrece la imagen de una especie de equilibrio, de idea de esfuerzo, de trabajo y de acción. Esta letra está designada en "Ehad" muy simbólicamente. Ehad (Aleph-Heth-Daleth), que significa textualmente "uno", indica la unión perfecta, la fusión de lo que está arriba y de lo que está aquí abajo. (Estas letras hacen un poco el mismo oficio que las 3 letras de la palabra "Aum" en sánscrito). En el Zohar (II-160, b., sec.: Therouma) está escrito: Escucha Israel, Jehovah Elohenou (nuestro Dios), Jehovah es Ehad (Uno). Cuando se pronuncia la palabra Ehad, se debe recordar que el Aleph designa el primer grado de la esencia divina, el Heth designa los ocho grados superiores formando la escala entre la Sabiduría Suprema y el Justo (ver en este sentido las interpretaciones del árbol sefirótico). Como el valor ordinario de la palabra Ehad es 13, es pues el equivalente de Ahaba que significa Amor. Así UNO y AMOR son idénticos y como en adición teosófica, 13 es igual a 4 (1 más 3 igual a 4), esto nos lleva al tetragrama Yod-He-Vaw-He y de este hecho al Adam- Kadmon también.
13 - TRECE es el símbolo de la organización en el seno de la vida maternal. Da la idea del desarrollo y del envolvimiento.
Como igualmente 14 tiene un papel considerable en el mecanismo sefirótico, su producto en el ciclo, según la expansión diferenciada, es ella misma, (ya lo veremos en el número siguiente).
El Zohar le llama: la Cabeza del Anciano de los Ancianos.
166 es el primer número de la procesión sefirótica y 13 es el primer número de la gravitación en el seno de 166 (ya lo veremos más adelante).
En el Idra-Rabba-Kadisha, libro IV, se habla de las trece direcciones iluminadas por el blancor de la cabeza (ver también Exodo XVI, 14). La palabra "tal", traducida por "rocío", es la principal, y su valor guamétrico es 39 (3 veces 13). La referencia del primer versículo es 52, igual a cuatro veces 13; la referencia del segundo versículo de apoyo, presenta dos números 26 (2 veces 13) y 91 (7 veces 13); el tercer versículo contiene el número 1.614 igual a dos veces 807, que viene de 87 78; cuyo Valor Secreto de 52 (primer versículo) es igual a 1.378 y se descompone por 13 y 78, cuyo total: 91 es igual a siete veces 13 y es valor secreto de 13. Este número es la Cabeza del Anciano de los Tiempos. (El Anciano de los Ancianos da: 1.133) o sea 13 ↔ 13 y la cabeza es el 13 (de: 13.861, valor secreto de 166) que, con el 39 (rocío), forma 13 más 39 igual a 52; es el número del primer versículo de apoyo, así como la triplicación: 13 por 3 igual a 39 y la cuadratura según 13 (que es cuatro veces 13) es igual a 52.
14 - CATORCE es el símbolo de organización en el seno de toda localización maternal de vida; ideas de envolvimiento y de desarrollo, igualmente como el 13, y que juega un papel importante (con el 5 también) en el mecanismo sefirótico; estos números (5, 13 y 14) están íntimamente unidos (raíz "Ghe" o "Ghou"), cuyo sentido está dominado por "Ghimel", de valor 5.
13 al cuadrado igual a 169 ↔ 16 más 9 igual 25, igual 5 al cuadrado.
14 al cuadrado igual a 196 ↔ 16 más 9 igual 25, igual 5 al cuadrado.
15 - QUINCE, como símbolo de la Energía, es el Amor Universal en el sentido selectivo. Es el valor de la letra "TEHT", signo de la resistencia y de la protección.
16 - DIEZ Y SEIS, que no figura en el alfabeto está obtenido por el 12 más 4 y da la raíz HEB, que define todo lo que está oculto y misterioso.
Da la idea de la fecundación, sobre todo por la hendidura de 8 más 8 (HEH). Es el huevo órfico de la nave de Isis. Diez y seis es el resultado de la tripartición de 48 (ver la significación de este número).
Es todavía el total de la base del triángulo de la emanación (Hochmah más Binah): 70 más 66 igual a 136, valor secreto de 16.
17 - DIEZ Y SIETE es sobre todo importante por su valor secreto 153, que juega un papel especial en el simbolismo de las Escrituras, sobreentendiendo por ejemplo las palabras "pescados", "niños", "cultivadores de los campos", como tratándose de "iniciados" (ver San Juan XXI-11 y otros pasajes del mismo género).
18 - DIEZ Y OCHO es un número-Clave complejo y constituye el signo de toda potencia manifestada y del punto brillante original. Es el valor de la letra "Yod" pero también por adición el valor de "TA", que expresa toda idea de resistencia, de repulsión. Simboliza el Yod inicial, el opuesto de 81 que caracteriza el Yod terminal. Sabemos ya que el Yod es la más pequeña y la más misteriosa de las letras del alfabeto hebraico, (está formada de una especie de pequeña coma). Esta simboliza el punto que expresa el "Pensamiento de la Voluntad desaprobante", emanada del Ain-Soph. Es la imagen de la manifestación potencial, el signo de la duración espiritual y de la eternidad de los tiempos, así como de todas las ideas que se relacionan.
19 - DIEZ Y NUEVE es el número caracterizado por los Grandes Arcanos de Egipto como el símbolo de la Inspiración. Su conjunto formado por el 10 más 9 da suficiente razón a su valor.
20 - VEINTE es el símbolo de la letra "Kaph", que es un signo asimilativo, es una vida sensata y pasajera, una especie de molde que recibe y devuelve todas las formas.
Kaph es una letra que se dice doble y que según el Sepher Yetzirah, fue creada con el Sol en el mundo, el martes en el año y la nariz derecha de la persona. En los Arcanos Mayores, el 20 representa la Resurrección.
21 - VEINTE Y UNO, que puede asimilarse al principio de Transmutación y caracteriza a menudo acontecimientos bruscos, por sus cualidades uranianas, se podría decir.
22 - VEINTE Y DOS o el último de los Grandes Arcanos, marca a veces el regreso; es sobre todo importante en su numerología sencilla. Se sabe que los alfabetos sagrados están compuestos de 22 letras y que es suficiente recordar que el Salmo 119, es un poco como el centro de la base interpretativa de la Biblia y compuesto justamente de 22 capítulos, mientras que los otros Salmos se resumen generalmente a algunos parágrafos. Las Biblias correctas inscriben siempre al principio de cada capítulo del Salmo 119, una letra hebraica al encabezamiento: Aleph, Beth, Ghimel, Daleth, He, Vaw, etc. hasta Taw, la 22da. letra, en correspondencia con los capítulos Nos. 1, 2, 3, 4, 5, etc.. Total 22: Dominio Total.
23 - VEINTE Y TRES, cuyo valor secreto es 276, es también el segundo valor de la palabra "cielos" (ver el 38).
Su expansión es 203 (se sabe que el cero no tiene valor esotérico), que tiene como valor secreto 20.706 que es a su vez una expansión simétrica de 276. Corresponde a "ACH", raíz hebraica compuesta de "potencia" (aleph) y "asimilación" (kaph): da idea de todo el esfuerzo que el ser hace sobre sí mismo o sobre otro para fijarse o fijarle. Simbólicamente, es el símbolo del movimiento concéntrico (el contrario es AL o EL), ACH representa la relación adverbial "Si" por oposición a "El" significando "No" (de valor opuesto: 32).
Filiación cíclica: 23 ↔ 276 ↔ 20.706 ↔ 203.
24 - VEINTE Y CUATRO es en principio la característica del Tessarakontayagrammaton: el vocablo de 24 letras empleado en magia para escribir el nombre de Dios, en el ritual litúrgico. Este número ofrece las posibilidades de extensión y se presenta como siendo bastante importante en ciertos dogmas del ocultismo.
Simboliza también la letra "Lameth" que ya es un misterio a dilucidar en el 30mo. grado de la Francmasonería; se encontrará esta letra en un triángulo radiante, como emblema de ciertos grados en sociedades secretas. Se sabe igualmente que esta letra considerada como sagrada, ha sido dada como inicial simbólica a los Grandes Centros Iniciáticos, a causa de Larissa (en turco: JaniSher) antigua, rica y célebre ciudad de Grecia que encerraba en sus muros una gran Escuela de Filosofía Pitagórica donde residió Anaxillas, quien fue acusado de magia y exiliado de Roma bajo Augusto. Después se ha remarcado a Latium, Luletia, Lucototia (Lutetia) en hebreo, Lukotain (barco), Leukothoe: diosa del mar. Pasemos todavía sobre Lutecia (antiguo nombre de París) y Lhassa (capital del Tíbet) para recordar que "LEMARBE" es la única palabra de toda la Biblia que está descrita con el "Mem" cerrado (valor 40 en lugar de 30 ordinariamente) y levanta todavía numerosas controversias acerca de los exégetas.
En fin el Lameth es el signo del Movimiento Expansivo; se aplica a todas las ideas de extensión, de elevación y de posesiones.
25 - VEINTE Y CINCO es el conjunto de 16 más 9 que pone en presencia dos polos perfectamente caracterizados. Uno, la matriz de los mundos (16), y el otro tendiendo a la individualización; 25 es la representación del Verbo Universal.
26 - VEINTE Y SEIS es el símbolo del "Yo soy" en lo que concierne al nombre del Padre que proclama el Hijo, la divina Esencia y la divina Existencia: IHOH.
El radical 26, su interno es 13 (13 en etrusco es IG, que se lee en veda o en sánscrito AG) que da nacimiento a IGni y AGiosh; en la inversión GA y GI, en hebreo, es la Esplendidez; en Veda: la potencia orgánica de AGni y también la penetración universal: "Nuestro Dios es un Fuego Devorador"...
27 - VEINTE Y SIETE caracteriza la raíz (Aleph-Lameth) entre los más importantes de la lengua sagrada, pues ésta da la idea de la fuerza excéntrica, de elevación y de extensión. Los árabes, como los hebreos, han sacado de ella el nombre de Dios.
Al o EL, intervienen característicamente en numerosos vocablos simbólicamente sagrados.
28 - VEINTE Y OCHO es más bien un símbolo cosmológico e interviene en los principios de física y de química (ver sobre todo el número 56).
29 - VEINTE Y NUEVE es el número que con el 38, ocupa una gran plaza en los comentarios bíblicos a la luz del texto original. Es el "Principio de la Vida aquí abajo". En la Ciencia numeral va casi siempre a la par con el 38 (el "Principio de la Vida de Arriba"). 29 se expresa sobre todo por las raíces: "Evah" o "Kou" (la madre de todos los vivientes y la fuerza asimilante y comprimente).
Siete veces 29 es 203 y siete veces 38 es 266 (el Ha-Haretz y el Ha- Shamain del primer versículo del Génesis: “Los Cielos y la Tierra").
El Valor secreto de 29 es 435, que adicionado con el Valor Secreto de 38 (741) da 1.176 que es el valor secreto del número 48 (ver éste) en relación también con 5.661: el producto que el Génesis ordena al principio de la creación (recordar que Elohim es 83 y recordar 5 y 29 que se constituyen así: con el valor secreto de 83 igual a 3.486 más el valor secreto de 29 multiplicado por 5 igual a 2.175 en total 5.661) y de esta relación inmediata con 166.500 y por restricción e inversión. (En efecto, 166.500, es restringido después en 1.665, invertido finalmente en 5.661). En fin el número 29 caracteriza la vida más baja, la de la tierra antes de su sumersión: El Cristo terrestre (Cristo celeste igual a 38).
30 - TREINTA está asimilado al elemento Agua y caracteriza la letra MEM, que es una de las tres letras madres del alfabeto hebraico, se encuentra también entre las cinco letras que se escriben diferentemente, en el cuerpo de una palabra o al final (como Kaph, Noun, Phe y Tzadé); además se llama Mem abierto en el uso corriente y Mem cerrado al final. El Mem cerrado está empleado en el cuerpo de una palabra UNA SOLA vez en toda la Biblia (en el término Lemarbé). Se le dice grave y añadamos que es un signo maternal y hembra, local y plástico, la imagen de la acción exterior y pasiva.
A
nalicemos
ahora el
glifo
del Mem
abierto y
del Mem
cerrado.
Empecemos
por 30
(la
razón
de su
valor
esotérico)
que toma
su valor
secreto (465)
y la rotación
en "c"
es 465
sufriendo
una mutación
seguida
de una
expansión
(al
lugar
"d"),
(pues
465 primero
y a
continuación)
4.560,
como valor
secreto de
95, a inscribir
en el
punto "e".
Aproximando los
dos número
de base,
30 y
95, tenemos
3095 que
no tiene
valor
secreto y
es la
razón
de una
abertura en
la letra, los
dos puntos que
no pueden
estar unidos.
Por el
contrario,
en la
multiplicación
del Mem
cerrado (valor
esotérico
40), tendremos
40 porque
el valor
secreto de
40 es
igual
a 820
y 28
es el
valor secreto de
7.
Esto será suficiente para hacer comprender que los glifos de las lenguas madres no han sido una cosa inventada al azar y que la Ciencia de los Números tiene razones profundas. Continuemos citando rápidamente los más importantes por cuanto se deducirán fácilmente los símbolos, que no están mencionados para no sobrecargar demasiado esta pequeña exposición. Es fácil de comprender, por otra parte, que los números se relacionan los unos con los otros y se encontrarán fácilmente las combinaciones.
32 - TREINTA Y DOS despierta seguidamente la idea de las Vías de la Sabiduría. Estos son los 32 caminos posibles en las canalizaciones del árbol sefirótico, la razón de los 32 grados de la escala del Escocismo para llegar a la cima masónica; es en el 32do. grado que es necesario responder del conocimiento de los planetas con su septenario simbólico.
Las 32 Vías con las 50 Puertas de la Inteligencia. Esta desigualdad no es más que aparente, pues es necesario crear la simetría enantiomórfica. Treinta y dos está opuesto a su inversión 23 (y 50 a 05) y así 23 más 32 o igualmente 50, más 05, dan en total 55, en un sentido o en el otro y el cual es el valor secreto de 10, expresando la Sabiduría y la Inteligencia. 32 corresponde todavía a El, de relación adverbial "No" por oposición a "Ach" que simboliza el "Si", de valor 23.
33 - TREINTA Y TRES es siempre popularmente el número más simbólico, pero en este sentido se puede decir muy poco en el plano desde el cual se analizan los números aquí. Número - Misterio por excelencia, acumula de esta manera las significaciones. Refiéranse, para las explicaciones de los 33 grados a mi obra "El Libro Negro de la Franc-Masonería".
Por la adición de dos letras-Madres (Mem-Aleph de valores 30 más 3) figura entre los números más importantes de la Biblia.
35 - TREINTA Y CINCO es el número del "último velo" que separa el mundo de la premanifestación, de éste de la manifestación (el Zohar habla del manto, a este objeto).
35 es el valor numeral de "Eleh" ("estos") la respuesta a la cuestión-clave planteada por el Zohar: "¿Quién ha creado esto?" Está provisto de 2 al cubo más 3 al cubo; es aún el Padre (18), la Madre (8) y el Hijo (9); es pues, como un símbolo de la Creación en relación al principio Creador. Eleh: eso).
36 - TREINTA Y SEIS es el signo de la existencia individual y producida. Este número procede también de numerosas raíces: "Ihe" (movimiento caracterizado dirigido hacia la existencia elemental), "dm" (igual a la simpatía universal, es también la sangre), "ihd" (manifestación de la unidad, acción de unirse), etc... está vinculado a la manifestación de toda potencia espiritual en relación con las ideas de división o de organización. Es la encarnación del 1 en el 35. Naturaleza profunda.
Valor Secreto del 8, 36 produce el famoso 666 (como valor secreto de 36).
Recordemos que según los Vedas, hay 36 Tattwas.
La Tradición astrológica habla de los 36 Decanos del Zodíaco.
En fin, simboliza igualmente la letra "Noun" que es el signo de la existencia individual y corporal. Imagen del ser producido y reflejado. Expresa la inteligencia superior.
37 - TREINTA Y SIETE, cuando está triplicado da 111, el número de la Tri- Unidad divina en su estatismo esencial. Su inversión (73) es un símbolo muy rico. Es todavía el número creador por excelencia (creado por 127: "bara") provisto por la encarnación del 1 en el 27; así, el número de la generación, el "Yo soy" ("Ehieh", como en el Éxodo III-13, cuando la voz de Dios habló por primera vez a Moisés).
38 - TREINTA Y OCHO está con el 29, entre las más importantes palabras, expresadas en número, en la Biblia. Es "el Principio de la Vida de Arriba". Se expresa por el radical "Meh" (chispa generadora, símbolo de movilidad). Su inversión (83) produce Elohim. Su valor secreto es 741 que sumado al V.S. De 29 (435) da 1.176 que es el V.S. del número 48 ("Ha" símbolo de la realidad física).
38 caracteriza la Vida intermediaria (celeste o cósmica; el 29 siendo el Cristo terrestre).
39 - TREINTA Y NUEVE es la existencia activa del ser, simboliza "AN" ("yo"), mientras que 363, será la existencia relativa el "ETH", ("tú").
40 – CUARENTA, se toma a menudo como símbolo de duración y su característica fue empleada frecuentemente para disimular una colectividad, un centro iniciático, etc... Su valor corresponde a la letra "SAMEKH" que es el signo del movimiento circular, la imagen de toda circunscripción.
43 - CUARENTA Y TRES está simbolizado por el vocablo "IEVE", que aparece por primera vez en el Sepher, en el segundo capítulo del Baereshith (versículo 4), mientras que el acto soberano está realizado y que el Ser de los seres se restablece en su inmutable "seité".
45 - CUARENTA Y CINCO es el valor de la letra AYIN (evitar confundir con la palabra "Ain", traducida por Nada o Vacío, cuyo valor es 57); esta 16ta. letra del alfabeto es el signo del sentido material.
48 - CUARENTA Y OCHO, es el número sintético del Génesis. Es el tercer número clave del Zohar. Puesto que 38 y 29 miden respectivamente una de las siete etapas de cada uno de los ciclos: Cielos y tierra, el 48 encierra el conjunto de los dos; (V.S. de 38 igual a 741; V.S. de 29 igual a 435; total 1.176, que es el V.S. de 48).
La Qabbalah (Ciencia de los Veinte y Dos) dice que el mundo ha sido creado por la palabra "MI" ("Quién") en cuya unión las dos letras, Mem y Yod, hacen 48. Es también el número de cromosomas que contiene toda célula reproductora humana; así 48 puede igualmente simbolizar la especie humana. (Asimilada al término "Aoun", raíz hebraica que simboliza todos los contrarios: virtud-vicio; fuerza-debilidad; todo-nada; etc.).
50 - CINCUENTA, como ya ha sido citado está íntimamente ligado con 32. Las 50 puertas de la Inteligencia son un símbolo muy misterioso, estudiado casi exclusivamente por los cabalistas. Es el coronamiento de un ciclo completo, de 7 sabbats (sábados), de años (Levítico XXV).
55 - CINCUENTA Y CINCO, que es el Valor Secreto de 10, presenta a veces un aspecto de la primera palabra del Génesis (Baereshith). Caracteriza la raíz "Oz" (fuerza) pero simboliza sobre todo, las dos manos.
56 - CINCUENTA Y SEIS, en su número estructural en química (por el número atomizado) caracteriza: el fósforo de magnesio, el bromuro de cobre, el antraceno, la pentaerytrita, la urotropina, los terpenes que existen en los aceites esenciales extraídos de las plantas, el agua oxigenada, la betaína, el filopirol. M. Sindler declara que el mecanismo 56 (es decir, la oscilación entre dos estructuras) está a la base de un fenómeno de ferromagnetismo (orientación de la brújula).
57 - CINCUENTA Y SIETE simboliza "Iom" (la palabra: día) que está en relación en este sentido con el número 74 (referirse a este). 57 es el valor de "Ha-Adam" pero convendría mejor el término "Ain".
59 - CINCUENTA Y NUEVE simboliza la palabra "BOOZ" (ver el 92).
60 - SESENTA, que es producto del valor doble de la letra madre "Mem", tiene un interés mágico, si se puede decir. Según el Sepher Yetzirah, puesto que este número es el valor esotérico de la doble-letra "Phé", su importancia está en relación con lo que fue expuesto en nuestro Propósito Psicológico No. II (creado con Venus en el mundo, el miércoles en el año, la nariz izquierda en la persona). Notemos, sin embargo, que este número (con 5, 6, 20, 120 y 360) está escrito en las ramas de la estrella de David, de la cual hemos visto ya una parte de su mecanismo.
72 - SETENTA Y DOS, se relaciona en principio y directamente al Heptacontaduagrammatón, que simboliza el nombre divino.
Caracterizado por la letra "TZADE", que está considerada teniendo un valor ideográfico de acto de coito por fulgurancia, es el signo final y terminal, relacionándose a todas las ideas de escisión de término, de solución y de objetivo. Situada al principio de las palabras, esta 18va. letra indica el movimiento que lleva hacia el término, del cual es el signo; al final de las palabras, este marca el mismo término al cual él ha tendido.
73 - SETENTA Y TRES, es el valor numeral del noveno Sephirot (Yesod), imagen o reflejo del 37. Se le encuentra también en 2.701 que es el producto de 2.812 menos 111 (relación también con 111). Es decir, el producto de los 4 conos (703 x 4 = 2.812), que pueden simbolizar la visión de las cuatro ruedas de Ezequiel que están dispuestas en 4 direcciones octogonales en una figuración del Cosmos, y de este total, 2.812, se sustrae (no 4 veces 37, sino tres veces solamente) lo que constituye el misterio de la Trinidad divina (111) y se obtiene este número 2.701 que representa la multiplicidad de los planos espirituales y materiales. 2.701 es el V.S. de 73. Ahora si se añaden los 111 a 73 tendremos 184, cuyo valor secreto es 17.020 que vuelve a dar por reducción o restricción 2.701 o 73.
74 - SETENTA Y CUATRO es un número-clave, tanto por su valor numeral, que representa la palabra Meleq (rey), como porque es la suma de los tres pisos del triángulo de la Emanación en el conjunto sefirótico y podría simbolizar a la palabra "día".
78 - SETENTA Y OCHO es un número motor del Cosmos. Es el constituyente de la Luz.
81 - OCHENTA Y UNO representa el Yod terminal, en oposición con el 18, el Yod inicial.
83 - OCHENTA Y TRES, inversión de 38, en sí muy importante, simboliza a Elohim, al Dios de los dioses, (El - los - Dioses) para el cual damos las explicaciones en el texto de esta pequeña obra.
87 - OCHENTA Y SIETE es el valor de palabra EDEN, cuya primera inscripción anotaba "Edin" como un plano de Babilonia; el supuesto "jardín del Edén" del libro del Génesis, sería una comarca entre el Tigris y el Eufrates. El valor aquí sería más bien un símbolo filosófico.
90 - NOVENTA es el símbolo de la letra "QOPH", el signo eminente comprensivo, astringente y cortante; imagen de la forma aglomerante o represiva.
92 - NOVENTA Y DOS es importante en tanto que es inversión del número 29; es también el valor de "Jakin", cuyo misterio no puede ser explicado sin traicionar los secretos iniciáticos.
96 - NOVENTA Y SEIS es el valor de la palabra Hamain (las aguas).
100 - CIEN es el número que indica una extensión producida por el deseo de extenderse, de manifestarse. La raíz de su nombre (Mem-Aleph-Taw) indica el deseo, y en todas las lenguas de Asia "MAH" significa "Grande".
111 - CIENTO ONCE es el número de la TRI-UNIDAD divina, en el sentido del Padre-Madre-Hijo, sobre la frontera del No-Manifestado y del Manifestado.
Su valor secreto es 6.216, cuyos sistemas de lectura dan interpretaciones muy importantes. (Por ejemplo, la lectura llamada simétrica, que es una especie de hendidura interviniendo en la Ciencia Numeral).
Lectura simétrica directa: 6216 es igual a 66 más 21.
Lectura simétrica inversa: 6216 es igual a 66 más 12.
Lectura simétrica directa con rotación: 6216 es igual a 66 más 12.
Lectura simétrica inversa con rotación: 6216 es igual a 66 más 21.
26106 es el V.S. de 228 (citado ya en el número SEIS); descomponiéndolo tenemos 10 y 266 (266 es el primer valor de la palabra "cielos" producido por 38 veces 7).
Además es el avatar con 21.660 y de ahí se extrae, pues, 6.216 (V.S. de 111).
21.660 es el resultado del V.S. de 228 (6 veces el V.S. de 38; es 6 veces 741).
Es avatar con 26.106 y los dos son avatares (salvo el cero) de 6.216 valor secreto de 111.
111 tiene numerosas descomposiciones: 100 más 10 más 1, y también 3 veces 37, y cuando está simbolizando "MI" (la palabra que ha creado al mundo), la raíz nacida de la unión "Mem" (grupo 30-81, que en lectura femenina cerrada 30 más 81 es igual a 111) es 3.081, valor secreto de 78.
(Ejemplo de lectura femenina abierta: 6.216 es igual a 26 más 16; femenina cerrada: 6.216 igual a 62 más 61. Lectura masculina directa: 8.778, lectura: 87 más 78; masculina inversa: 6.216 igual a 26 más 61).
La sexualización de un número es la operación que consiste en separar las dos partes afinitivas una de la otra. En el Génesis II-21 se lee: “Entonces, Jaweh Elohim hizo caer un sopor sobre el hombre que se durmió y tomó una de sus costillas". Esta creación de la mujer se explica como sigue: 561 menos 3 es igual a 558. 561 y 3 son las dos partes afinitivas del V.S. de 57, (valor de Ha- adam) es decir, 1.653, y así 558 corresponde a una de sus costillas. El problema de la sexualización de los números es el problema de la Involución- Evolución (la descomposición de los números y de sus valores secretos en partes afinitivas, de donde proviene la consecuencia de su gravitación interna, es decir, de las permutaciones que permiten las re-combinaciones).
114 - CIENTO CATORCE, es muy importante en la Tradición (111 más 3); es la palabra "GERMEN", que en los textos originales es TSEMAH, para designar la fuerza divina que prepara la manifestación del Hijo (Zacarías III-8).
Es el avatar de 141: Rouah (aliento de Vida o Espíritu).
120 - CIENTO VEINTE está asimilado directamente a la letra "RESH", que según el Sepher fue creada con Mercurio, el jueves y la oreja derecha. Es el signo de todo movimiento propio, signo original y frecuentativo, imagen del renovamiento de las cosas en cuanto a su movimiento.
123 - CIENTO VEINTE Y TRES es el valor numeral de las Raíces-claves AR y RA de carácter universal, que se encuentran en numerosas lenguas antiguas como denominación de Dios (Ra) y de movimiento rectilíneo (Ar).
131 - CIENTO TREINTA Y UNO es el valor de la mano (derecha o izquierda) (262 valor de las dos manos). Número de síntesis de los 4to. y 5to. Séfiros.
132 - CIENTO TREINTA Y DOS, valor de la palabra "AOUR"(luz), su V.S. es 8.778 cuyas dos partes, 87 y 78 son simétricas una a la otra y no superponibles. 87 más 78 es igual a 165, que orientado simétricamente da 561 (V.S. de 33) que antes de ser hendido formaba 1.653 (Zohar II-19a.), el valor secreto de "Ha-Adam" (57).
137 - CIENTO TREINTA Y SIETE es la constante cósmica (de Eddington) y se encuentra constantemente en la Biblia.
138 - CIENTO TREINTA Y OCHO es la evaluación de la palabra hembra (Noun-Qoph-Aleph-Resh) en relación con 150 ("macho").
145 - CIENTO CUARENTA Y CINCO es igual a 5 veces 29, de donde su importancia desde el principio de la Ciencia Numeral, en relación directa con la palabra Baereschith pues además su valor secreto es 10.585 (forma esotérica de 685 del Baereschith).
147 - CIENTO CUARENTA Y SIETE, cuyo valor secreto produce 10.878 que se lee 87 más 18 igual a 105, avatar de 150 (valor de la palabra "macho" en el texto bíblico, Génesis I-28).
150 - CIENTO CINCUENTA, evaluación de la palabra "macho" (Zayin- Kaph-Resh); su valor secreto es 11.325, en el cual es interesante notar que 113 más 25 (113 25) es igual a 138, evaluación de la palabra "hembra".
153 - CIENTO CINCUENTA Y TRES es el número de AOR-AG-NI. Es un símbolo muy potente entre los Rose-Croix (Rosa-Cruz); recordemos también que es el número de granos que constituyen los rosarios ("rosa"). ¿Es necesario insistir sobre el hecho de los 153 peces de la pesca milagrosa? (San Juan, XXI- II).
166 - CIENTO SESENTA Y SEIS: número del Ain-Soph.
180 - CIENTO OCHENTA es el símbolo de la letra "SHIN", signo de la duración relativa y del movimiento que se relaciona. Caracteriza el elemento Fuego.
183 - CIENTO OCHENTA Y TRES, es el valor de la raíz "AS", que expresa la idea de hogar; es "Malcuth" a partir del 110 de su creación, más el 73 suplementario. Cabalísticamente es interesante por el primer término del nombre "As-at-ar-oth".
276 - DOSCIENTOS SETENTA Y SEIS, es el V.S. de 23. Es el producto de la polarización de 23 bajo la acción del Tiempo (ver 203). Es el segundo valor da la palabra Cielos. Por fisura 6.216 o también 26 más 7. Una transposición muy interesante podemos citar aquí: "Israel es la Santidad del Señor..." está escrito a Jeremías (capítulo 2, versículo 3), lo que no parece haber sido situado por azar para formar así 23, cuyo valor secreto es 276, que es el valor de la palabra "Kodesch" (Santidad), traducida desgraciadamente muy a menudo por "consagrado".
296 - DOSCIENTOS NOVENTA Y SEIS, número del Arich-Anpin (la Gran Figura) (refiérase al número 13, con la mención de la cabeza del Anciano de los Tiempos).
333 - TRESCIENTOS TREINTA Y TRES es el símbolo de César, como el 444 es el de Lilith (parte inferior de los mundos de aquí abajo), la hermana de Lucifer y que sería la primera mujer de Adán! 555 es el número de la semana; 666 es el número de "la Bestia" (rival de Jesús); 777 es el número de la tierra y 888 el número de Jesús.
345 - TRESCIENTOS CUARENTA Y CINCO simboliza la palabra Israel, que proviene de 59.685 en su V.S. que es el anillaje de 1.443 (descomposición de "Tiphereth"). Este sería también el número de Schiloh y de Moisés.
360 - TRESCIENTOS SESENTA, aparte de su simbolismo potente por los grados de una circunferencia, es la característica de la última letra del alfabeto hebraico "TAU", que es el signo de la reciprocidad, la imagen de todo lo que es mutuo y recíproco. (Es el signo de los signos, dice Fabre d'Olivet). Esta doble letra habría sido, según el Sepher, creada con la Luna, el viernes y la oreja izquierda.
Con este número terminamos lo que era importante saber de una manera primordial, para seguir mejor las definiciones, teniendo relación con las materias de la Qabbala, particularmente con la guametría y los valores esotéricos. Recordemos que hay 24 divisores enteros de 360, pero como ni el 1 ni el 2, corresponden a figuras geométricas, quedan entonces 22 polígonos regulares a marcar en el círculo; primero el triángulo, después el cuadrado, el pentágono, el hexágono, el octógono y de este modo, sucesivamente los polígonos de 9, 10,12, 15, 18, 20, 24, 30, 36, 45, 60, 72, 90, 120, 180 y 360 lados. A estas cifras corresponde una letra hebraica y estas cifras son los valores esotéricos y no el número de orden empleado a veces, que tiene un carácter esotérico correspondiente a una significación ordinaria. Evitar también confundir con el Valor Secreto de un número, de lo cual hablaremos al final de este capítulo.
En fin, digamos también una palabra sobre el signo "Cero", que fue empleado por primera vez en el tratado hindú "Suria-Sidanta". Cero procede del árabe "Sifr" (vacío) y de éste se ha hecho "cifra" (Sifr es la traducción del sánscrito "Sunia"). La historia no ha conservado el nombre del Hindú que inventó el cero y del cual los geómetras árabes se apoderaron y no se puede atestiguar si los Babilonios, los Mayas y otros pueblos no lo conocían ya con anterioridad. Representa en la Ciencia Numeral: el espacio vacío que sirve de matriz a todos los números.
Otros muchos números pueden también interpretarse de la manera aquí expuesta, pero no podemos extender demasiado nuestras explicaciones. Sin embargo, citemos algunos ejemplos más:
666 - SEISCIENTOS SESENTA Y SEIS, que es el número de la Bestia (citado en el Apocalipsis XIII-18), está obtenido por las seis permutaciones posibles de 1, 2 y 3 en dos termarios. El primero por permutación circular... etc. (como ya está explicado en el Propósito Psicológico II). 666 es el V.S. de 36, es Attis en griego, el rival de Jesús (1 más 300 más 300 más 5 más 10, igual a 616 del dativo, pero con 50 más del acusativo, hacen 666).
83.250 - OCHENTA Y TRES MIL DOSCIENTOS CINCUENTA es el resultado del total de los Valores Secretos de cada uno de los dos ternarios producidos por las permutaciones de 123. Es decir que estos dos dan (con 166.500) una ley de enantiomorfismo : 166.500/2 igual a 83.250.
166.500 - CIENTO SESENTA Y SEIS MIL QUINIENTOS es el total de los V.S. de los seis números constituyentes de las permutaciones de 123 (ejemplo ya citado con 666 y en el Propósito II). Este término de 166.500, da a pensar en las dos palabras más importantes de la tradición hebraica:
1. El Incognoscible y
2. La Corona. El primero situado por encima y fuera del árbol sefirótico y el segundo en la cima.
V.S. de |
123 |
7.626 |
V.S. de |
231 |
26.796 |
V.S. de |
312 |
48.828 |
V.S. de |
132 |
8.778 |
V.S. de |
321 |
51.681 |
V.S. de |
213 |
22.791 |
|
|
166.500 |
Ain-Soph igual a 166 y Kether igual a 500.
Del Ain-Soph a Kether es el pasaje del No-Manifestado al Manifestado, que desarrolla a continuación todo el Arbol cabalístico.
166.500 en restricción (por los ceros sin valor) es igual a 1.665, número invertido de 5.661 que es el resultado del acto inicial del Demiurgo. (En relación con el número 575).
Podríamos cerrar aquí el cuadro sobre el simbolismo de los números diciendo una palabra final sobre los Valores Secretos.
Está escrito en el Sepher Yetzirah (Capítulo IV, versículo 4); "A las 22 letras el Creador las ha trazado, tallado, multiplicado, pasado e invertido y ha formado las criaturas y todo lo que será creado. ¿Y de qué manera las ha multiplicado?. El Aleph con todas y todas con el Aleph, el Beth con todas y todas con el Beth, el Ghimel con todas y todas con el Ghimel, todas giran en círculo (Sello de Salomón) y sucede que estas salen por 231 puertas y resulta que todas las palabras salen bajo un mismo nombre. Es pues el número de combinaciones que pueden procurar las 22 letras dos a dos, dicho de otra manera: (21 X 22) / 2 = 231. La partida de los Valores Secretos se encuentra multiplicando un número )del cual se necesia el (V.S.) por su inmediato superior y dividido por dos.
La fórmula simplificada es: V.S.N. igual a: |
|
El Valor Secreto de un Número debe ser sobretodo entendido por el total compuesto de este número, es decir añadiendo a su valor aparente la suma de lo que está oculto. Así 6, totaliza más de lo que representa habitualmente: 1 + 2 + 3 + 4 + 5 = 15, de donde 6 + 15 = 21.
Todo esto se acuerda para los Valores Secretos de Primer Orden, inscribiéndose V.S. y nombrándolos a veces "números triangulares".
Los Valores Secretos de Segundo Orden, representados por el V.S.² son llamados a veces "números piramidales" y el valor de 3 viene a ser 10; de 5 será 35. Ejemplo: V.S.² de 5 igual 1 + 3 + 6 + 10 + 15 = 35.
Hay todavía los Valores Secretos del Tercer Orden y Superiores como V.S.⁴, V.S.⁵, etc.
Lo que teníamos que decir de los Números es suficiente para nuestras explicaciones de Filosofía Científica actual.
1En 1956 los Propósitos Psicológicos fueron publicados durante su retorno de los Himalayas y de su peregrinaje por los 5 continentes, en Niza, Francia, en forma de fascículos mensualmente. Ver la Introducción Biográfica, “Sus 61 Cartas Circulares”, Tomo I, Ediciones G.F.U. México.
2 Nota del Coordinador de la Literatura: La ciencia cabalística de las permutaciones está unida a la propiedad que se estudia a la faz de diferentes ciencias: En Química por ejemplo Mitscherlich estableció que las substancias isomorfas tienen sin embargo, fórmulas químicas semejantes, y se dice de compuestos que a pesar de que cristalizan en forma semejante, son capaces de dar cristales mixtos y tiene la propidad de que los cristales de uno de ellos, pueden crecer sobre los cristales de otro. También se aprecia que la estereoisomería es la existencia de compuestos diferentes, con igual fórmula de constitución, pero que difieren en la distribución espacial de los átomos. En cristalografía geométrica son también 32 las clases de simetría, en el mismo número que las 32 vías simétricas del árbol qabbalístico, demostrando la unidad de todas las ciencias. Las leyes de relación entre los números pueden ser entre el valor numeral, valor secretro (V.S.) valor al cuadrado, valor al cubo, por descomposición, adición,sustracción, reducción, adición teosófica, partición, inversión, permutación circular, síntesis, ligazón, expansión, restricción, mutación, lecturas simétricas, masculinas y femeninas, sexualización y recombinación. Por notárica, themoura, filiación psíquica, así como múltiplos, submúltiplos, etc. Ver las Leyes de Relación entre los Números en el Libro Negro de la Francmasonería, del Maestre Dr. Serge Raynaud de la Ferrière.
3Ver fórmula de los valores secretos al final de este Propósito.